Mientras el mundo se preparaba para vivir cada cual según su creencia religiosa la Semana Mayor, un hecho conmovió todos los sectores, el emblemático templo de Notre Dame era víctima de un voraz incendio.
Cuando lejos están aún los resultados de la investigación para saber qué ocasionó que uno de los dos símbolos de París, Notre Dame y la Torre Eiffel, el trabajo de contención realizada por los más de 400 bomberos lograba que se produjera la suspensión de un orden natural como se llama a un milagro y alcanzar a mantener en pie la gran estructura y algunas partes internas que hablan por si mismas de la grandeza que acompañó ocho siglos de vida.
Notre Dame no está fuera del interés general, Notre Dame lograba mientras cientos de ojos tenían la misma imagen en su retina, que la solidaridad diera frutos incluso antes de que el Presidente Macron saliera a anunciar que no se dejaría fuera del interés del gobierno la idea de lanzar una convocatoria para volver a dar al templo gótico que fue testigo de dos guerras mundiales y una revolución, el esplendor que la devoción tiene desde este sitio.
A pesar de que otros monumentos históricos de Francia permanecen en lista de espera de ser tomados en cuenta para ser atendidos, Notre Dame tendrá recursos de fuentes privadas para que su restauración no se detenga por esta razón, solo el tiempo estará pendiente de que tanto pueden tener esas fuentes generosas su oferta, al señalar expertos que no podría ser menor a diez años y hasta pudiera alcanzar los 20 el tiempo de su restauración, que por el momento, no toma en cuenta las obras de arte que no podrían ser vueltas a pintar sin que se llamaran imitaciones, y se discuten las técnicas que podrían ser usadas para la restauración, lo que deja aún en esta tierna etapa donde las cenizas indican el paso voraz del fuego, que la fragilidad y las razones menos esperadas pueden destruir la historia.
El Ayuntamiento de París por lo pronto ha bloqueado 50 millones de euros y destinado de inmediato 10 para iniciar la recuperación de esta joya de la historia, recursos a los que se han sumado al menos unos 600 millones de euros de propietarios de empresas exitosas que no han dudado en apostar por la recuperación de Notre Dame, así como el propio Gobierno de Macron y el Banco Central Europeo.
Ahora, lo que viene, son los estudios que realizaran a la par de las investigaciones sobre las causas de éste incendio de la también sede de la Arquidiócesis de París. De la afectación del llamado choque térmico al que fue sometida la estructura con el calor y con el agua, restablecer la silueta de la Catedral, pero lamentablemente uno de los conjuntos más bellos de este sitio se han perdido para siempre. Y dejan una lección para los otros sitios importantes para la colectividad y para la cultura y para todas y todos nosotros, lo que tenemos como historia, debe ser cuidada como patrimonio, lo que se va, no vuelve.
