/ lunes 7 de septiembre de 2020

Segundo informe, más dudas que resultados

Sin pretender convertirme en juez, pero creo que es necesario poner sobre la mesa del análisis, el segundo informe de gobierno que rindió en su mañanera el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en el que, por desgracia no coincide con la realidad que se vive en el país.

Empezando por el grave tema de la pandemia, que, a pesar de las afirmaciones del subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell Ramírez, de que se aplano la curva de contagios, México ocupa los primeros lugares en letalidad por la pandemia del Covid-19.

Con más de 65 mil fallecidos, el presidente no lo incluyó en rendición de cuentas a la nación y literalmente lo omitió, cuando la pandemia, no solo ha desnudado las graves carencias del sector salud, sino además la enorme brecha que separa de ricos y pobres, en cuanto al acceso a la atención médica.

Creo que, era el momento propicio de que el titular del ejecutivo federal informará sobre el cambio de estrategia en el combate al patógeno, para dejar ese nada honroso tercer lugar de fallecidos por la enfermedad, solo por debajo de los Estados Unidos y Brasil.

Que decir del tema de la seguridad, donde López Obrador, aseguró que ha habido una disminución de homicidios dolosos, es más, afirmó que ya no hay masacres, cuando la cruda realidad es distinta y se documentan a través de los medios de comunicación.

Así como el afirmar que disminuyó la extorsión y que según en su informe, solo subió 12.7 por ciento, pero se paso por alto decir que debido a la pandemia hubo cierres de negocios y de toda actividad turística, lo que obligó a las personas al confinamiento.

No pretendo desmenuzar todo el contenido del segundo informe, por eso me remito a los temas más importantes que preocupa al pueblo mexicano, en particular a los guerrerenses, en donde se vive al día debido a las condiciones de marginación y pobreza que se padece en Guerrero.

Por eso creo, que hay más dudas que resultados en este segundo informe de gobierno, del que se esperaba más, porque hubo optimismo de que se diera a conocer las estrategias para recuperar a la economía, pero tal parece que el panorama no es nada halagador y que aumentará el número de pobres.

Así que hay que estar preparados, porque la espada de Damocles se cierne sobre nuestra cabeza que amenaza con caer en cualquier momento sobre nosotros, si no se aplica un plan “B” en la estrategia de gobierno para el 2021.

¿O usted que opina querido lector?

Sin pretender convertirme en juez, pero creo que es necesario poner sobre la mesa del análisis, el segundo informe de gobierno que rindió en su mañanera el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en el que, por desgracia no coincide con la realidad que se vive en el país.

Empezando por el grave tema de la pandemia, que, a pesar de las afirmaciones del subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell Ramírez, de que se aplano la curva de contagios, México ocupa los primeros lugares en letalidad por la pandemia del Covid-19.

Con más de 65 mil fallecidos, el presidente no lo incluyó en rendición de cuentas a la nación y literalmente lo omitió, cuando la pandemia, no solo ha desnudado las graves carencias del sector salud, sino además la enorme brecha que separa de ricos y pobres, en cuanto al acceso a la atención médica.

Creo que, era el momento propicio de que el titular del ejecutivo federal informará sobre el cambio de estrategia en el combate al patógeno, para dejar ese nada honroso tercer lugar de fallecidos por la enfermedad, solo por debajo de los Estados Unidos y Brasil.

Que decir del tema de la seguridad, donde López Obrador, aseguró que ha habido una disminución de homicidios dolosos, es más, afirmó que ya no hay masacres, cuando la cruda realidad es distinta y se documentan a través de los medios de comunicación.

Así como el afirmar que disminuyó la extorsión y que según en su informe, solo subió 12.7 por ciento, pero se paso por alto decir que debido a la pandemia hubo cierres de negocios y de toda actividad turística, lo que obligó a las personas al confinamiento.

No pretendo desmenuzar todo el contenido del segundo informe, por eso me remito a los temas más importantes que preocupa al pueblo mexicano, en particular a los guerrerenses, en donde se vive al día debido a las condiciones de marginación y pobreza que se padece en Guerrero.

Por eso creo, que hay más dudas que resultados en este segundo informe de gobierno, del que se esperaba más, porque hubo optimismo de que se diera a conocer las estrategias para recuperar a la economía, pero tal parece que el panorama no es nada halagador y que aumentará el número de pobres.

Así que hay que estar preparados, porque la espada de Damocles se cierne sobre nuestra cabeza que amenaza con caer en cualquier momento sobre nosotros, si no se aplica un plan “B” en la estrategia de gobierno para el 2021.

¿O usted que opina querido lector?