La historia es parte intrínseca de lo que hemos hecho que nos dirige a caminos a seguir.
No voy a entrar a cuestionamientos estériles por conveniencia plural e incluyente, ya que es importante amalgamar la unidad y el desarrollo económico, social y político del país, a la exigencia nacional.
Confirmo mi responsabilidad para reconocer lo que la mayoría ciudadana ha determinado. Si más del 53% de los votantes determinó el cambio de ruta política, adelante y si ésta tendrá carro completo en el Congreso de la Unión, mayor es nuestra responsabilidad para observar la gobernabilidad que vendrá y, en especial, de dónde se sacará la plata para pagar las medidas populistas ofrecidas.
Trato de asimilar los intereses económicos que ejerció el “Cuarto Poder” para impulsar al hoy presidente electo: ellos serán los más beneficiados, los que engordaron el populismo pejista, los que han tendido la alfombra roja.
Muy pocos comunicadores de prestigio se mantuvieron al nivel esperado. La mayoría se encargó de engordar el caldo a los ULTRAS de Morena, los llamados “Pejezombies” que seguramente deben seguir festejando su triunfo electoral.
Fueron ellos -el Cuarto Poder- quienes permitieron cacarear lo que siempre dijo el presidente electo con matraca abierta: “todo lo que existe en México está mal, todo es corrupción, yo voy acabar con ella, y a ustedes se les va a regresar lo que merecen, apoyos económicos”. Espléndidas ganancias tendrán por SEIS años.
Qué decir de la inconciencia de “quién va a amarrar al tigre”, y eso de que, si Morena perdía o se identificaba fraude alguno, a todos los mexicanos se nos presentaría el “Diablo”. Bendito lo que viene para México, con tales antecedentes.
A entender y comprender de fondo los “Resultados que dieron las tarjetitas de CUATRO MIL PESOS entregadas a cada persona que asistió al estadio azteca y la compra anticipada de votos”, ofreciendo los beneficios económicos a la paisanada, en especial a los famosos “NINIS” que se convertirán en “los Halcones”, como el grupo de choque creado con Luis Echeverría, quienes recibirán 5 salarios mínimos, sin atar y hacer nada, sólo esperar la orden para levantarse y proceder contra la ciudadanía.
La realidad es que hoy tendremos un nuevo gobierno que como todos los anteriores, prometen mucho y en especial con éste, no alcanzo a comprender cómo concretará los postulados del “Pejenomics”. Realmente no sabemos quién es ese López. De excelencia el amigo Salustio Juárez que nos comparte la insensibilidad del próximo presidente López:
“En entrevista reciente Ricardo Rocha le comentó a López Obrador que en caso de ganar el Congreso, tendrá una enorme tentación autoritaria. Respondió “No, no, no, no, no el poder es humildad; el poder solo tiene sentido cuando se pone al servicio de los demás; no me interesa la parafernalia del poder ni el autoritarismo, ni la dictadura; lucho para que haya una auténtica democracia en el país y que juntos podamos construir una utopía… un sueño”.
Complica entender esta amarga utopía que responde a la realidad misma de gobiernos anteriores, que pulularon esa maldita corrupción, impunidad y opacidad que pensaron que nunca la perderían. No adelanto vísperas, pero confirmo mis dudas por la forma de cómo gobernará López, que hoy ofrece humildad y plena democracia, empezando por su familia.
Esto mismo acontece en el Gobierno de Astudillo Flores, que, a casi la mitad de gobierno, no ata ni desata, lo que permitió votos a López. Negligencia absoluta.
A LOS POSTRES…
NUNCA ENTREGAR UN CHEQUE EN BLANCO a quien sea. Es decir, si López ganó, adelante y a trabajar ordenadamente, fiscalizándole sus acciones y resultados. Reitero, no conocemos a López, sus discursos de Palacio Nacional y el lunes pasado con Loret de Mola, son totalmente diferentes.
TRABUCO EL DE ASTUDILLO FLORES, ahora sí tendrá que trabajar y dar resultados, especialmente en no seguir dando pleitesía a la “Mafia del Poder Empresarial”: el Señor de la Riviera Diamante.
DE EXCELENCIA LOS TRIUNFOS de las alcaldías de Chilpo y Taxco de Alarcón.
