El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, busca trastocar al Instituto Nacional Electoral (INE) con el plan "B", a través de la modificación de las leyes secundarias, que pareciera más un acto de venganza.
Así lo externó el dirigente del Comité Directivo Municipal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Bulmaro Cabrera Rojas, quien dijo que la reforma electoral representa el recorte a su presupuesto y de algunas áreas de este organismo autónomo que ha sido garante de procesos electorales, al garantizar imparcialidad en la designación de las autoridades y representantes populares.
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Aseguró convencido que pareciera un acto de venganza del presidente, debido a que en el Congreso de la Unión no aprobó la Reforma Electoral, con la que se pretendía trastocar al INE, en aras de afectar la organización de las próximas elecciones, con la desaparición de algunas áreas.
Recordó el dirigente del partido del Sol Azteca, Cabrera Rojas, que en el 2023 se realizarán las elecciones en el Estado de México, donde se va a cambiar el ejecutivo estatal y en Coahuila, donde también se renueva al gobernador, al legislativo y 27 diputaciones, además que después viene el proceso electoral en la que estará en juego la presidencia de la República.
En su opinión, el Plan B, se va a ir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y se espera que se le de reversa, de tal suerte de no permitir que se afecte las elecciones, principalmente a la organización de las mismas, pero sobre todo que se ponga en riesgo a nuestra democracia.
Hay incongruencia por parte de quienes hoy forman parte de este nuevo régimen llamado cuarta transformación, porque se les olvida que, las y los que hoy están representando en espacios del ejercicio público, emanaron de elecciones neutrales organizadas por el Instituto Nacional Electoral, además les entregó sus constancias de mayoría relativa y que ahora, ellos mismos lo desconocen como un árbitro neutral, cuando les garantizó certeza, legalidad y transparencia, apuntó.
