El derrumbe de rocas y piedras es latente del cerro que sufrió un deslave durante la pasada temporada de lluvias, cuyos escombros aún permanecen bloqueando la banqueta de la avenida Ruiz Cortines.
En un recorrido realizado por esta importante avenida, en el tramo que se localiza a unos metros de la Facultad de Sociología de la Universidad Autónoma de Guerrero, de la colonia Bocamar, se pudo observar el abandono por parte de las autoridades.
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Se trata del derrumbe que deslizó una enorme roca y aplastó una camioneta que estaban reparando frente a un taller mecánico, en donde en esa ocasión un empleado salvo la vida de milagro. Esto ocurrió en la pasada temporada de lluvias y nunca se retiró el escombro del lugar.
Según vecinos del lugar, existe el temor de que cuando empiece a llover, se vuelva a reblandecer la tierra y ocurra un nuevo derrumbe, con el riesgo de que cause algún accidente mortal.
Incluso, los escombros continúan bloqueando la banqueta de la avenida Ruiz Cortines, obligando a los peatones a caminar por el arroyo vehicular.
Otro peligro es que el asfalto está resbaloso, debido a que hay un escurrimiento de aguas negras que formó un lodo negro y que pone en riesgo de que alguien sufra una caída y se lesione.
Reprocharon que pese a que esta a la vista de todos el cerro desgajado, el cúmulo de escombros, la basura y el escurrimiento de las aguas residuales, ninguna autoridad ha intervenido para limpiar la zona y construir un muro de contención.
