Desde hace dos años, la Administradora y Promotora de Playas en Acapulco no renta las sillas ni sombrillas en la zona federal porque prestadores de servicios particulares se quedaron con lo permisos transitorios que otorga la Semarnat, luego de que la pasada administración estatal dejó de pagarlos y se perdieron.
El director de la dependencia estatal, Alfredo Lacunza dijo que al no pagar la pasada administración los permisos de zona federal, la Administradora y Promotora de Playas perdió por segundo año, 17 áreas para colocar mobiliario en estas vacaciones decembrinas.
“Desde hace dos años, que estaba la otra administración se fueron quedando los particulares con todos los transitorios, es decir, Promotora de Playa dejó de pagarlo y los particulares lo obtuvieron para ellos”.
Dijo que los permisos transitorios los siguen operando los prestadores de servicios turísticos particulares , que son quienes los solicitaron en un principio cuando la Administradora y Promotora de Playas dejó de pagar.
Lee también: Sectur espera derrama de 7 mil millones de pesos por vacaciones
“Nosotros estamos en espera que se libere alguno para poder nuevamente a pasar a manos de la promotora turística pero es un proceso que nos tiene que autorizar la Semarnat”.
Recordó que los permisos transitorios se otorgan cada cuatro meses y los particulares lo siguen renovando y “esperamos recuperarlo en alguno momento para que regresen a manos de la promotora de playas”.
El funcionario estatal, reveló que para que la administradora de playas fuera sustentable daría el servicio de renta de mobiliario y además de operar la recolección de basura y tener el control de las playas.
Añadió que en cada temporada vacacional se deja de percibir grandes cantidades de dinero y ahora ya no ingresa nada.
Estimó que la perdida de económica asciende entre 80 a 100 mil pesos diarios por no rentar la sillas y sombrilla, “son grandes cantidades de dinero que deja de ingresar a la dependencia”.
Recordó que la Administradora de Playas tenía precios que estaban cómodos de 50 a 100 pesos para los turistas y residentes y ahora están desmedidos, sin control y sin un tabulador por parte de los particulares.
Dijo que el mobiliario de playa se quedó entre particulares porque en la entrega recepción no recibieron ninguna silla ni sombrilla, solo dejaron 60 sombrillas en desuso.