Falseando del pie izquierdo, don Rosendo Sánchez, camina hasta llegar a las mesas que atienden los servidores de la nación, para recibir su tarjeta del Banco del Bienestar y cobrar su pensión, después de vivir toda su vida de panadero.
Como él, 662 personas más con discapacidades graves, moderadas y las leves, tras cumplir con todos los requisitos del programa, recibirán alrededor de dos mil pesos de apoyo, con una cantidad adicional por el retroactivo que comprende del mes de agosto a este mes de enero.
Don Rosendo, dice que el miércoles por la noche le hablaron para informarle que fuera al Centro de Convenciones de Acapulco, a recoger su tarjeta del Banco del Bienestar, por lo que ya cobrará la primera pensión del programa.
Confiesa que hace unos años le diagnosticaron que padecía de diabetes y como descuidó su salud, le amputaron un dedo de su pie y esto le impidió seguir haciendo pan, que es oficio del que ha logrado mantener a su familia y sacar adelante a sus cuatro hijos.
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"Tengo un pequeño horno de gas, haya en mi casa en Pie de la Cuesta, donde hago cien piezas de pan y son las que vendo a los vecinos, como ya me conocen, me compran el canasto y de ahí sostengo a mi familia", dijo.
Con orgullo refiere que el oficio lo aprendió de su padre, pues era también panadero en San Jerónimo de Juárez, de donde emigran al puerto de Acapulco y es aquí en donde emprende su propio negocio, que mantiene hasta la actualidad.
Don Rosendo precisa que sus conocimientos se los transmitió a sus cuatro hijos, todos saben hacer pan y ahora que no ha podido trabajar es uno de sus vástagos, quién elabora el producto para su venta y de ahí sale para comer.
Confiesa que ya no es negocio ser panadero, pues se elevó el costo del bulto de harina, antes valía 450 pesos y subió a 900, en tanto que el azúcar costaba 600 pesos el bulto y ahorita cuesta mil 100, la caja de manteca vegetal la encontrabas en 650 y está a mil 50.
Lo mismo pasó con la manteca de cerdo, que de 600 pesos hoy cuesta 900 pesos, a esto hay que agregar el gas, por eso la pieza también subió de precio, antes costaba 3 pesos, subió a 4, 5 y hoy se vende en 6 pesos.
Expresó su agradecimiento a quienes operan el programa de Pensión para el Bienestar de las Personas con Alguna Discapacidad, porque, en su caso, le representa un apoyo que le va a permitir poder cubrir los gastos de curación de su pie y para la consulta.
