Guerrero confinado a permanecer en los últimos lugares en materia de reprobados, al reducir el ciclo escolar 2023-2024 a 90 días, cuando en este estado suriano nunca se cumple con el calendario escolar.
El presidente de la Asociación de Padres y Tutores por la Educación del Estado de Guerrero, Fernando Díaz Ángeles, sostuvo que quien haya tenido la brillante idea de reducir los días de clases del año lectivo, solo afectará el proceso de enseñanza-aprendizaje de las y los alumnos.
Reprochó que no se haya hecho un estudio serio antes de modificar el calendario escolar, el cual debería de estar apegado a la realidad, porque lamentablemente seguimos entre los estados de mayor rezago educativo.
Parte de este panorama se debe a qué el magisterio guerrerense, carece de compromiso con su noble labor de enseñar y como prueba, algunas escuelas de preescolar, primaria y secundaria, ya concluyeron el año lectivo y están de vacaciones, cuando el ciclo escolar concluye en la última semana del mes en curso.
Díaz Ángeles lamentó que algunos padres de familia opten por el silencio, sin percatarse que los únicos afectados son sus hijos, principalmente aquellos que son de lento aprendizaje y que tienen problemas de lectura, pues requieren de mayor atención y de más horas de permanencia en las aulas escolares.
Dijo que sin pretender ser amarillista, los alumnos que terminan el sexto grado de primaria, la mayoría no logrará ingresar a la preparatoria, en virtud que algunos apenas alcanzaron un 7 de calificación, que equivale a un 5.5, pues debido a que no se cumple con el calendario escolar terminan con un bajo aprovechamiento educativo.
Esto le da sentido a su preocupación de que los 90 días del año escolar venidero, no se van a cumplir y continuarán las viejas prácticas de los maestros de ausentarse de sus centros de trabajo por cualquier pretexto, sin importarles que esto va en detrimento de la educación de las niñas y los niños guerrerenses.
