El más pequeño de sus hijos duerme en una improvisada hamaca construida con una costalilla color rosa, atada con mecate y diferentes cordones sobre algunas varillas o tubos mientras conversamos escuetamente.
Perla, es una de tantas mamás pepenadoras que hay en Acapulco y a sus escasos 21 años, ha procreado a cinco pequeños con diferentes parejas.
La joven madre pasa el día al lado de sus pequeños. Su actual pareja, también se dedica al mismo trabajo donde sacan algunos pesos para sobrevivir y alimentar a los hijos.
Ella, vive en una de las colonias más marginadas de Acapulco, en el Sector 6 parte alta, desde donde a diario lleva consigo a sus otros cuatro pequeños. El primero nació cuando ella tenía 13 años de edad, y su trabajo está localizado en la central de abastos.
Como ella, hay otras historias, de quienes ayer no tuvieron la bendición de ser agasajadas con desayunos, comidas o cenas, con flores y regalos el día de las madres.
