En su segundo día de manifestaciones, trabajadores del Instituto del Bachillerato del Estado de Guerrero bloquearon la avenida Gobernadores en exigencia de que se destituya al director general Ernesto Ávila Damián.
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El grupo de manifestantes inició un paro indefinido la mañana del martes en sus oficinas ubicadas en la calle Constructores en la colonia Habitacional Jacarandas.
Los manifestantes acusan a Ávila Damián de corrupción y hostigamiento laboral, dado que ejerce presión hacia los empleados para que acepten un reajuste salarial del 50 por ciento o si no renuncien.
Son alrededor de 39 los trabajadores inconformes, quienes demandan una mesa de diálogo para renegociar sus salarios, tomando en cuenta su antigüedad laboral.
El grupo de personas se desempeña como empleados administrativos, quienes tienen a su control más de 320 planteles en todo el estado, así como mil docentes y más de 12 mil alumnos.
Los manifestantes mantienen la decisión de permanecer en paro, hasta que las autoridades educativas destituyan a Ernesto Ávila Damián.