Gerónima, viajó una hora y media desde Coacoyulillo a Chilpancingo para buscar atención médica, desde un día antes había empezado con un fuerte dolor en el vientre y su bebé de siete meses de gestación dejó de moverse, al llegar a la capital fue ingresada al hospital del Niño y la madre donde dos días después sus familiares denunciaron no tener información de ella y aseguraron que aún no la intervenían para retirar el producto del que su corazón había dejado de latir.
De acuerdo con cifras del gobierno federal, en el estado de Guerrero, durante lo que va del año se han registrado 30 muertes maternas, lo que nos sitúa con un indicador ligeramente menor que el del 2021 cuando a la misma fecha se tenían 37 casos.
El reporte que incluye hasta la semana epidemiológica número 47 se establece que las instalaciones del la secretaría de Salud entre las que se incluiría el hospital del Niño y la madre donde se denunció la negligencia para atender a la joven mujer, han registrado el 50 por ciento de los casos de muerte materna, es decir 15 incidencias.
La otra mitad de casos se encuentra 4 en el Instituto Mexicano del Seguro Social, y 11 sin atención médica, que habrían fallecido en sus propios hogares en comunidades donde no se tiene atención médica de forma permanente y no tiene capacidad para trasladarse a las ciudades que es donde se encuentran los hospitales.
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El reporte de la Secretaría de Salud establece que la razón de mortalidad materna calculada es de 29.8 defunciones por cada 100 mil nacimientos estimados, en todo el país, sin embargo en Guerrero se estima que esta cifra podría llegar a cerca de 60 fallecimientos por cada 100 mil habitantes y nos encontramos muy por encima de la media nacional.
Las principales causas de defunción son hemorragia obstétrica que ocupa el 17.4 por ciento; Enfermedad hipertensiva, edema y proteinuria en el embarazo, el parto y el puerperio que suman un 17.2 por ciento; Aborto 7.8 por ciento; Enfermedades de las vías respiratorias 6.5 por ciento y Complicaciones en el embarazo, parto y puerperio 6.5 por ciento.
Cabe reconocer que en todo el país y especialmente en Guerrero las cifras de muerte materna se han tenido a la baja desde el 2017 que nos situaban con el estado con mayos número de incidencias en el país, pero y hoy estamos muy lejos de ese deshonroso lugar.
El caso de Gerónima es la situación que viven la mayoría de las mujeres de comunidades del estado de Guerrero, que al estar embarazadas no encuentran atención correcta y si se complican deben viajar a los hospitales, en el caso de Gerónima Carbajal Benítez, la atención primaria tendría que haberla recibido en su pueblo Coacoyulillo, situado en la sierra de Chilpancingo, al rebasar la capacidad de atención debe viajar hasta el hospital con centro de salud con servicios ampliados, que se localiza en la comunidad de Ocotito, sin embargo a este lugar nadie acude porque saben que nunca tiene servicio, por cosas simples como que no hay médicos, la luz del quirófano está descompuesta y muchas otras justificaciones.
El caso llegó al hospital del niño y la madre Guerrerense en Chilpancingo, mismo en el que se han registrado muchas denuncias por casos de negligencia sin embargo los médicos y directivos del nosocomio, siempre han justificado en que se trata de casos que se complicaron en su lugar de origen y cuando llegaron a este lugar simplemente ya no había nada que hacer.
La madre de la joven Gerónima Carbajal Benítez, la noche del jueves, denunció que su hija fue internada pero casi 48 horas después no sabían que había pasado con ella, pero estaban seguros que aún no la intervenían y eso sin lugar a dudas ponía en riesgo su vida.
