El paso a desnivel de Chilpancingo, una obra construida hace casi 4 décadas para aligerar el problema de vialidad en el centro de la capital y ampliar la plaza cívica Primer Congreso de Anáhuac, será transformado para que además de seguir siendo la avenida de mayor flujo vehicular, sea un espacio de difusión cultural.
El proyecto que presentaron un grupo de jóvenes estudiantes del noveno semestre de arquitectura y que ya fue aprobado por el gobierno municipal, contempla colocar una enorme máscara de tigre en la entrada del paso a desnivel, de tal forma que parecerá que se está comiendo a los vehículos.
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En el interior será iluminado con luces led de colores y en las paredes se realizarán pinturas murales con temáticas culturales e históricas de la capital de Guerrero, “la intención es darle al diseño urbano un sentido de identidad como la capital cultural y histórica que somos”. Expresó Kevyn Vinalay uno de los orquestadores del proyecto.
“Estará con moderna iluminación led de colores que hacen disfrutar el trayecto impregnado de cultura sobre los muros que transforman por completo la esencia de nuestra capital”.
En el interior las pinturas se basarán en fotografías logradas por el fotoreportero José Luis de la Cruz, que se mezclaran con motivos históricos y personajes que resaltan hechos como la independencia, la revolución, incluso de la época prehispánica con Cuahutémoc.
El proyecto se iniciará en su construcción de inmediato y se pretende que esté concluido el 15 de diciembre para que se inaugure en el marco de la Feria de Navidad y Año Nuevo y se disfrute durante el paseo del pendón.
Otra acciones para embellecer Chilpancingo serán pinturas urbanas con motivos culturales en al menos una decena de esquinas de por las que pasa el tradicional paseo del pendón.