La alianza del PRD con el PRI y PAN no fue impuesta por las dirigencia nacional, sino aceptada por la militancia local y nos permitió ganar distritos (federales y locales) y espacios en los ayuntamientos.
Así lo aseguró el dirigente estatal del PRD, Alberto Catalán Bastida, quien dijo que el partido tiene que resolver problemas del presente y conseguir sus objetivos a través de la unidad.
"¡Basta de añorar desesperadamente el pasado! Mejor vamos ocupándonos por sentar las bases que brinden más y mejores condiciones para Guerrero durante los próximos años", afirmó en sus redes sociales.
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Catalán Bastida señaló que la política en el Estado, atraviesa por un proceso de transición. "Esto significa que, durante estos meses, cada quien deberá asumir el costo de sus decisiones y así mismo analizar y evaluar su participación durante la contienda".
También aclaró que no es tiempo de buscar culpables, "la alianza en Guerrero no fue impuesta por la cúpula. Fue aceptada por los dirigentes estatales y avalada por la dirigencia nacional".
Es válido que cada quien tenga su propia interpretación de lo acontecido, pero los hechos reflejan que nuestra alianza electoral, dijo, les permitió disputar y ganar 12 de los 28 distritos locales, así como tener triunfos en un gran número de ayuntamientos.
Pidió dejar la polarización y el individualismo para avanzar en unidad y concordia.
"Al enemigo le conviene encontrarnos divididos, pero a nuestro partido le hace falta la fuerza de todas y todos, para sortear cualquier desafío", puntualizó Catalán Bastida.
