"El juego del calamar" es una serie de Netflix que está a punto de convertirse en la serie más exitosa desde la creación de dicha plataforma de streaming, debido a que a poco más de dos semanas de su estreno, más de 82 millones de cuentas han accedido a dicha producción.
Su trama gira sobre 456 competidores con problemas económicos que reciben una misteriosa invitación para participar en un juego de niños llamado "El juego del calamar", donde si ganan obtendrán un premio es de 45,6 mil millones de wones pero si pierden es la muerte .
Una muñeca que todo lo ve y todo lo oye, con voz aniñada diciendo "Luz roja, luz verde", define la suerte de los participantes mientras el tiempo se agota.
¿Por qué "El juego del calamar”?
Su nombre tiene origen en un juego donde los competidores deben dibujar en el suelo un calamar usando formas geométricas (círculo, cuadrado o triángulo). Si un participante logra llegar a la cabeza del calamar de su contrincante, es el ganador.
El creador de la serie, Hwang Dong-hyuk, relata que comenzó a escribir El juego del calamar en el año 2008 y terminó en 2009 , el cual para aquella época parecía algo desconocido y violento.
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De acuerdo con su creador, "El juego del calamar" tiene factores y reglas únicas, ya que normalmente en los juegos de supervivencia se mira a los ganadores, sin embargo en la serie, los perdedores son el principal punto de interés.
Aquí la trama
Entre los participantes de "El juego del calamar" se encuentra Seong Gi-hun, personalizado por Lee Jung Jae , quien da vida a un hombre que desempleado y adicto a las apuestas, lo que lo lleva a fracasar en su matrimonio y separarse de su hija de diez años. Es acosado por sus prestamistas por deudas millonarias, amenazándolo con quitarle uno de sus riñones para saldar la deuda.
Por esta situación decide arriesgar su vida con el fin de pagar sus deudas y darle buena vida a su hija, convirtiéndose en el jugador número 456.
El número telefónico es real
Dentro de la trama aparece un número telefónico al que miles de personas han llamado y el resultado no es el que esperaban , ya que resulta que pertenece a un ciudadano de Corea del Sur, quien lleva semanas recibiendo llamadas de desconocidos.
Las llamadas y mensajes de texto se incrementaron hasta 4 mil al día, alterando su vida de tal forma que no lo dejan ni dormir.
El propietario del número telefónico, quien lleva diez años con él y está vinculado a su negocio, afirma que un político le ha ofrecido 85 mil dólares para comprárselo.
