Oriundo del estado de Oaxaca, don Adrián García Ramírez es ejemplo de tenacidad y de creatividad , al dedicarse a elaborar artesanalmente juguetes con personajes de caricaturas para los niños.
Desde los primeros rayos del sol sale de su vivienda que tiene en el Fraccionamiento Tulipanes en la zona suburbana de Acapulco, para recorrer las escuelas que están dispersas en Ciudad Renacimiento y ofrece sus juguetes en miniatura.
Hombre sencillo y con disposición a la breve entrevista, comentó que es maestro jubilado "mi ciclo se cerró en las aulas en el 2011, pero no me alcanza mi pensión para sostener a mi esposa ya mis dos hijos".
Refiere que por aquel entonces buscó trabajo en su natal Oaxaca, pero por su edad nadie le dio empleo y conoció a un joven que acaba de pegar su condena en un Centro de Readaptación Social y fue quien le enseñó a hacer estas artesanías.
Explicó que su fabricación tiene varias ventajas, el material no es costoso y lo compra en la Ciudad de México por mayoreo, admite que no es difícil crearlos pero si es laborioso.
Don Adrián explicó que el juguete consta de un alambre rígido, un pequeño resorte y se coloca la figura, que puede ser desde algún personaje de Disney o un minion que salen en la película "MI Villano Favorito" , que se deslizan por el alambre.
De ahí tomó la decisión de venir al puerto de Acapulco, con la idea de vender sus juguetes a los turistas, pero como llamaban más la atención a los niños optó por ir a las escuelas, en donde en ocasiones tiene buenas ventas.
Cada juguete artesanal lo vendo a 20 pesos , es barato y con esto sacó para el sostén de mi hogar, pero también para pagar los estudios de mis hijos, "que pronto se van a recibir", dice orgulloso.
Disculpe, pero si no vendo no hay para la papa, se refiere y atiende a un cliente potencial que a llanto abierto le pide a la autora de sus días le compre la figura de un minion y para no perder la venta el profe le muestra cómo se desliza por el alambre, que atiza el llanto del pequeño para que le compren el juguete.