Aún conserva el timbre y la nitidez de una voz que un día fue líder del grupo musical La Clave de Acapulco, por eso don Abisael Monroy, le canta a la vida y también para ganarse unos pesos.
Este singular personaje recorre las calles del primer cuadro de la ciudad, cargando su bocina al hombro, en la que conecta su micrófono y regula el sonido para dar tonos al grave y al agudo.
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Una vez que se instala, preferentemente en fondas o donde haya mucha gente, prende su aparato e inunda el ambiente la canción: "Recuerdame bonito" que han hecho éxito, desde Joan Sebastián, Pepe Aguilar, entre otros.
Pero don Abisael le pone su propio estilo, las estrofas salen con un real sentimiento, que es imposible no poner atención; al terminar, el premio son unas monedas.
Una vez que guarda su aparato, acepta una breve charla y dice que es oriundo de San Martin Tixtlancingo, municipio de Coyuca de Benítez, orgulloso refiere que fue campesino y vivía del campo.
"Las cosas se pusieron difíciles y me vine al puerto de Acapulco, a buscar trabajo, pero como me gusta cantar me contrataron en el grupo musical La Clave de Acapulco", contó con orgullo.
Dijo que fue tanta su dedicación al canto que se convirtió en la primera voz del grupo allá por los años 70's, hasta que se terminó la buena época de la ola grupera y se disolvió La Clave de Acapulco, pero no se rindió y formó su propio grupo musical: Los Limbers.
Don Abisael le expresa su agradecimiento a su hermano Pepe, por apoyarlo y que ahora siga en la música, aunque lo hace de solista y asegura que le va muy bien.
Padre de diez hijos, de los cuales cinco viven en los Estados Unidos, da gracias de poder ganarse la vida haciendo lo que más le gusta, que es cantar.
Es tiempo de seguir adelante, este músico continúa cantándole a propios y extraños, una canción de las 300 que tiene su repertorio, la mayoría románticas y del género de baladas, aunque también "no canta mal las rancheras".