En su combi color negra de los años 70 transformada en una vulcanizadora móvil, la familia Pérez Obregón, procedente de la Ciudad de México llegó l mañana de este lunes al puerto de Acapulco, con la finalidad de poder pasar en la playa los últimos días de esta temporada de vacaciones.
Una noche antes los seis integrantes de la familia, empezaron con el arreglo de las maletas que acomodaron en el pequeño espacio que se tiene al interior de la vulcanizadora móvil, para emprender el viaje a las 06:00 de la mañana de este lunes y poder llegar al puerto de Acapulco antes del medio día para disfrutar de sus playas.
El largo viaje que duró entre cinco o seis horas a bordo de la vulcanizadora móvil en la que también traen los llamados gallitos (llantas usadas para vender si se da la oportunidad en el trayecto del camino), valieron la pena según la señora Laura Obregón, porque podrán disfrutar de las playas de Acapulco el destino de playa que ya en tres ocasiones lo han visitado, pero por primera vez en su combi transformada.
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Son seis los integrantes de la familia Pérez Obregón, entre estos tres adultos y tres menores de edad, quienes se sumaron a los miles de turistas nacionales que aún se encuentran disfrutando de las distintas playas de este puerto en estos últimos días de la temporada de vacaciones.
La combi, viene equipada en su interior con todo lo necesario (herramientas) que se requieren para realizar las maniobras de cambios de llantas, reparación de neumáticos tanto en calles, avenidas y carreteras como es el caso en la Autopista del Sol donde auxiliaron a tres familias que también se dirigían a este puerto, además también cuentan con atención a domicilios particulares a quienes los requieren en toda la Ciudad de México.
La idea de la transformación de la vulcanizadora móvil, inició desde hace unos seis años, y se concretó hace cuatro años apenas, esto ha sido de gran satisfacción porque se trabaja en lo que uno quiere y lo hace de la mejor manera, no solo en un punto de la ciudad, sino en todos lados donde se requiere de un cambio de llanta o de una reparación, dijo don Fernando Pérez, quien es el jefe de la familia.
“No es malo venir de vacaciones unos días al puerto de Acapulco, y porque no ganarse un dinerito extra que siempre hace falta por medio de nuestra vulcanizadora móvil, disfrutamos del paseo, pero también trabajamos si alguien lo requiere, traemos desde llantas gallitos, hasta la manguera del aire, tornillos y la llave de cruz para quitar las llantas ponchadas de los vehículos”, expresó don Fernando al arribar a la zona de la costera Miguel Alemán junto a los integrantes de su familia.
La familia Pérez Obregón, espera estar en el puerto de Acapulco, hasta el próximo viernes para el sábado regresar a la Ciudad de México, para preparar todo para el reinicio de los días de clases de los hijos, además de las labores que quedaron pendientes antes de llegar a este destino de playa.