El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Enrique Castro Soto, afirmó que el sector empresarial de Acapulco recurrirá en los próximos días a tribunales federales para presentar los amparos contra la ley antitabaco, lo anterior luego del rechazo que se ha dado a los procedimientos que se iniciaron en este destino de playa.
En entrevista al participar en la presentación del proyecto “Expocomer 2023” a realizarse en Panamá, el dirigente empresarial manifestó que la Canirac ha presentado hasta el momento un total de 30 recursos de amparos contra la ley antitabaco, de los cuáles dos de éstos, ya fueron desechados por los tribunales, por lo que no descartó que el número de procedimientos no aprobados aumente de forma considerable.
“Si es un impacto muy negativo el reglamento de la ley, la cual nosotros rechazamos desde el momento que se aprobó porque se prohíbe de manera determinante dar servicio de alimentos y bebidas a cualquier persona que este consumiendo productos de tabaco inclusive hasta afuera de los negocios, aun cuando los al interior de los inmuebles tienen áreas asignadas para el consumo de cigarros, es una disposición muy incongruente”, precisó.
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Castro Soto, lamentó que las autoridades judiciales estén desechando las peticiones de amparo a los que hemos recurrido por la afectación que se tendrá por esta ley antitabaco, porque el impacto negativo podría ser según estudios de un 20 a un 40 por ciento en la disminución de los ingresos económicos de los negocios.
Lamentó mucho que se estén desechando los recursos de amparos presentados, sobre todo porque como empresarios, creemos que, si se tienen todas las condiciones para dar el servicio de consumo de tabaco, garantizando los espacios libres de humo para los consumidores que no son adictos a los cigarros.
Insistió que lo que tienen que hacer a través de los abogados de la Canirac es recurrir a la siguiente instancia federal, en la que sí se tendría seguridad de poder lograr tener la suspensión total a favor del sector empresarial de Acapulco, como sucedió con una cadena de establecimientos que logró evitar que se le prohibiera la venta y la exhibición al público de las cajetillas de cigarros.