El puerto de Acapulco se ha convertido en caldo de cultivo de enfermedades de las vías respiratorias y conjuntivitis, debido a las nubes de polvo que enrarecen calles y avenidas, después de las lluvias.
Este jueves durante la madrugada se registraron precipitaciones pluviales por el ingreso de humedad proveniente del Océano Pacífico, que volvieron a generar encharcamientos en las partes bajas de la ciudad.
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Sin embargo, puso en alerta a las autoridades del sector salud, debido a que por el fuerte calor se empezaron a levantar nubes de polvo por el incesante paso de los vehículos.
Este polvo no solo afecta a las vías respiratorias, sino también es factor de contaminación ambiental, además de ser un alto foco de infección que podría provocar conjuntivitis.
A esto hay que añadir que los cúmulos de basura aceleraron su proceso de descomposición y generaron fétidos olores.
Incluso, personal de Protección Civil tuvo que rociar con cal y con ello reducir el riesgo de una emergencia sanitaria por estos tiraderos a cielo abierto.
Hasta el momento no hay reportes oficiales de atención por malestar derivado por la contaminación ambiental, sin embargo, si hay enfermos de las vías respiratorias, diarreicas y dengue.
