Tres grandes hoteles a punto estuvieron de cerrar de manera temporal por los destrozos que sufrieron por el paso del huracán Otis y dejar sin empleo a más de 300 trabajadores, pero finalmente decidieron reactivarse e invertir en su reconstrucción.
Se trata de los hoteles: Copacabana, El Calinda y El Alba, que se encuentran ubicados sobre la costera Miguel Alemán y en la Zona Dorada de este destino de playa, todos emblemáticos y de gran tradición.
El secretario general del Sindicato Gastronomíco de la sección 34 de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), César Landin Pineda, reveló que fueron días de incertidumbre que vivieron, dada la magnitud de los destrozos que sufrieron estas tres hospederías.
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Sus respectivos propietarios por un momento dudaron en mantener el contrato colectivo de trabajo con el personal sindicalizado, toda vez que los daños son millonarios y se va a requerir de varios meses los trabajos de reconstrucción.
Fue entonces que en las reuniones que sostuvo con cada uno de los empresarios de la industria sin chimenea, les ofreció que todo el personal de base estaban dispuestos a realizar el retiro del escombro y la limpieza, incluso, entrarle a los trabajos de reconstrucción.
El dirigente obrero, Landin Pineda, precisó que la buena noticia es que cada uno de sus patrones le tomaron la palabra y de ésta manera se logró salvar la fuente de empleos de los más de 300 trabajadores que pertenecen a la sección 34 de la CTM.
Admitió que dada la magnitud de la devastación que sufrieron por el impacto del fenómeno meteorológico categoría 5 en la escala Saffir Simpson, les llevará meses estar en condiciones de abrir, por eso hicieron el compromiso de entrarle al rescate de sus centros de trabajo.
Cabe recordar que el mismo dirigente obrero, César Landin Pineda, está en estos momentos haciendo todo lo imposible por salvar la fuente de empleo de 60 trabajadores de base del hotel Amarea, que está a punto de cerrar de manera temporal por los daños que sufrió, cuya suerte se definirá la próxima semana.
