Quizá en otros estados existan condiciones para impartir clases presenciales, pero en Guerrero no están preparados para hacerlo en virtud de que no se han frenado los contagios de Covid-19, sostuvo el presidente de la Agrupación de Padres y Tutores por la Educación del Estado de Guerrero, Fernando Díaz Ángeles.
Entrevistado sobre la posibilidad del regreso a clases presenciales en este estado suriano, tal y como lo anunció hace unos días el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que este estado suriano es muy especial y en estos momentos sería muy difícil pedirles a los padres de familia que lleven a sus hijos a las escuelas.
En ese sentido, recordó que recientemente se salió del semáforo epidemiológico de color rojo y se notificó que se volvía a amarillo, aún cuando no se ha logrado frenar el contagio del patógeno y que la letalidad siga en aumento.
Díaz Ángeles aseguró que, otro factor que impide el retorno a las clases presenciales, es que casi la totalidad de las escuelas se encuentran en estado de abandono, es decir, con basura, maleza y con graves deterioros en su estructura, producto de la falta de mantenimiento y que requieren de un duro trabajo para habilitarlas.
Recordó que desde hace meses pidió a la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), que se ordenará la limpieza, retiro de la maleza y de la limpieza total de los planteles escolares, para iniciar la sanitización de los salones, pero nunca lo tomaron en cuenta.
Afirmó que no se trata de llevarle la contraria a las autoridades, sino de poner en primer plano la realidad que se padece en las escuelas y que, deben de entender que no hay condiciones para las clases presenciales "creo que lo más prudente es esperar y no arriesgar la salud de las niñas y niños guerrerenses".