Un documento de la Comisión para la Prevención de Riesgos Sanitarios confirma que la mayoría de las actividades masivas que se realizaron en el marco de la Feria de Navidad y Año nuevo no contaron con permiso para su realización y se catalogaron como actividades “prohibidas”, pese a ello y el riesgo que representaron para la población el gobierno de Norma Otilia Hernández Martínez determinó realizarlas y exponer a la población.
El oficio número COPRISEG/SEMR/DPCP/006/2022, establece específicamente que el evento denominado Porrazo del Tigre celebrado el día 19 de diciembre, no contó con aprobación y se trataba de una actividad totalmente prohibida.
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Se especifica que para esa fecha el ayuntamiento sólo había solicitado la aprobación para realizar el Paseo del Pendón que ya es público que fue negado y en ningún momento solicitó permiso para hacer el Porrazo del Tigre.
Y es que el acuerdo que establece los porcentajes de ocupación y horarios de diversas actividades esenciales y no esenciales considera prohibidas este tipo de actividades masivas por el riesgo que representa para la salud de la población ante los contagios de Covid-19.
Entre las actividades para las que el ayuntamiento de Chilpancingo solicitó permiso únicamente se encuentran el paseo del pendón el 19 de diciembre, el Teopancalaquis y acostada del niño Dios el día 24 de diciembre y la inauguración de la feria el día 25 del mismo mes.
Mientras que actividades en las que se violaron flagrantemente los protocolos de ocupación como el baile de la Banda el Recodo o las presentaciones de Gloria Trevi y María José, no tuvieron solicitud de permiso, tampoco lo hubo para la misa de fin de año que congregó a miles y miles de personas en la plaza de toros.
Cabe resaltar que apenas durante la Feria de Navidad y Año Nuevo decenas de trabajadores del Ayuntamiento resultaron contagiados de Covid-19 incluidos síndicos y regidores, funcionarios de primer nivel y familiares cercanos de la alcaldesa que todos los días estuvieron en las actividades del teatro del pueblo, donde no hubo ningún protocolo de sanidad.
En los días subsecuentes a la conclusión de la feria, en la capital se empezó a presentar una situación reciente y descontrolada de contagios de Covid-19 hasta que llegamos a superar al puerto de Acapulco en casos activos pese a que el puerto tiene una población cuatro veces mayor de la de nuestra capital.