En Acapulco, no sólo se sufre de problemas como ambulantaje, inseguridad y por la falta de servicios públicos, sino también el robo desmedido de energía eléctrica que hacen cientos de vendedores ambulantes que se conectan de puestos ubicados en la vía pública.
Entre las avenidas de Acapulco, donde se tiene el mayor problema de robo de energía eléctrica, son la Costera Miguel Alemán, la Avenida Cuauhtémoc, Ruiz Cortines, Constituyentes y el bulevar Vicente Guerrero.
Además de la zona de Zócalo, la explanada de la Quebrada y el área de Caleta y Caletilla donde los vendedores ambulantes conectan cables de forma directa de los postes a sus puestos.
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El robo de la energía eléctrica, no sólo provoca un gasto económico millonario para el ayuntamiento a través del derecho de alumbrado público a la CFE, sino también un gasto en la compra de redacciones para la reparación de luminarias que se descomponen ante las descargas que se Provocan al conectar cables de forma irregular.
El director de alumbrado público, Erick Alberto Bello Jaimes, reconoció que el problema del robo de energía eléctrica por medio del servicio de alumbrado público que se tiene en las calles y vialidades, es grave considerando el daño económico y estructural que se ocasión al conectar cables de muy baja calidad y resistencia.
"No solo se tiene un déficit de lámparas que no funcionan en las calles de la ciudad, sino que también existen problemas que generan que muchas luminarias se descomponen como las lluvias y hasta por las descargas provocadas por el robo que hacen comerciantes informales que se cuelgan con cables para poder tener el servicio en sus puestos donde venden sus productos”, expresó Erick Alberto Bello Jaime.
El robo de energía eléctrica de correos en la vía pública, en ocasiones no sólo se practica por propietarios de puestos irregulares, sino también hasta por propietarios de establecimientos comerciales regularizados.
Son más de 300 bajadas irregulares las que se han detectado en varios postes ubicados en varias avenidas de Acapulco, de todas estas, se toman datos para iniciar en algún momento algún tipo de procedimiento legal.
En 90 por ciento de los comerciantes que se roban la energía eléctrica, son propietarios de negocios de venta de artesanías, de alimentos en la vía pública y vendedores de aparatos electrodomésticos que requieren de este servicio para funcionar.
