La presidenta Adela Román Ocampo afirmó que en Acapulco seguirán los operativos para aplicar la ley en bares donde no se estén respetando las medidas sanitarias para contener la pandemia del Covid-19.
"Ahorita está prendido el intermitente y nos dice que podemos pasar al semáforo rojo, porque los hospitales se están llenando otra vez, por lo que el ayuntamiento tiene que hacer su tarea", expresó luego de haber asistido al primer informe de actividades del secretario del sindicato de la CAPAMA, Gonzalo Arias Cárdenas.
La alcaldesa dijo que los dueños de los bares solamente han demostrado que les interesa más lo que puedan ganar, que la propia salud de sus trabajadores y comensales.
Dijo que se les dio la oportunidad de abrir cuando pasamos al semáforo amarillo, pero lamentablemente no cumplieron con las medidas de prevención que se requería para evitar el aumento de contagios de Covid-19, y ahora se debe de ser más estricto.
Señaló que en la mesa de coordinación para la Construcción de la Paz en Acapulco se exigió que el ayuntamiento fuera más estricto porque se tenía la información de que otra vez los hospitales se estaban llenando y la alerta se prendía para regresa al color rojo en el semáforo epidemiológico.
Agregó esperar que los empresarios entren en razón porque la pauta de las medidas a aplicar la va a dar la Secretaría de Salud.
Recalcó que los operativos en bares continuarán en la ciudad, porque la prioridad es garantizar la salud de los acapulqueños y turistas que acuden a este tipo de negocios en el puerto.
Por otro lado, al referirse al tema de la CAPAMA, la primera edil de la ciudad informó que rechazó una propuesta de entregar la paramunicipal a la Comisión Nacional del Agua.
"Quién propuso que yo entregará la CAPAMA a la Conagua, fue el director de CAPASEG, propuesta que rechacé y lo que hice fue insistir en el rescate del organismo".
Indicó que la CAPAMA podría tener el tercer rescate financiero por parte de la Federación.