La celebración de la cuadragésima octava edición del Tianguis Turístico 2024 en Acapulco, Guerrero, fue un hecho significativo en el intento por revitalizar la industria turística en esta icónica región de México. Sin embargo, es importante reconocer que este evento, aunque loable en sí mismo, requiere de un mayor acompañamiento de acciones para resolver los desafíos más profundos que enfrenta el turismo en Guerrero.
Indudablemente, el Tianguis Turístico representa una oportunidad invaluable para promover los destinos turísticos de México y atraer inversiones al sector. Este año, Acapulco se vistió de gala para recibir a miles de visitantes y profesionales de la industria, demostrando una vez más su encanto y potencial como destino turístico de clase mundial.
Cierto es que el Estado de Guerrero, tierra de playas paradisíacas, rica cultura y gente cálida, ha sido históricamente uno de los destinos turísticos más importantes de México. No obstante, tras el embate del huracán Otis y la falta de apoyo gubernamental, el sector turismo ha sufrido graves consecuencias.
Recordemos que el turismo no solo genera ingresos económicos para la región, sino que también impulsa la creación de empleos, la inversión en infraestructura y el desarrollo de comunidades locales. Es un sector vital que beneficia a una amplia gama de industrias, desde la hotelería y la gastronomía hasta el comercio local y las artesanías.
Lamentablemente, a pesar del paso del tiempo el gobierno federal no ha brindado los apoyos necesarios para enfrentar los estragos causados por el huracán Otis.
Ha sido la iniciativa privada la que ha mostrado un mayor compromiso con la comunidad al otorgar prórrogas y beneficios a las personas afectadas. Lo que hace evidente que se requiere una mayor coordinación entre el sector público y privado para impulsar una recuperación integral en la región.
En este sentido, una medida urgente es la exención del pago de la luz por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para los afectados, al menos por un año. Esta acción aliviaría la carga financiera de las empresas turísticas y permitiría su recuperación gradual. Además, es necesario que se otorguen créditos accesibles a través de Fonatur para incentivar la inversión y la reactivación económica en la región.
Otro aspecto crucial es la infraestructura turística. Si bien Acapulco cuenta con una amplia oferta de hoteles, restaurantes y atracciones, es necesario invertir en la modernización y mejora de la infraestructura existente. Carreteras, aeropuertos, puertos y servicios públicos deben estar adecuadamente desarrollados y mantenidos para garantizar una experiencia turística satisfactoria y atractiva.
La reactivación del turismo en Guerrero no solo beneficiará a los empresarios y trabajadores del sector, sino también a las comunidades locales que dependen de esta industria para su subsistencia.
Sin duda alguna, reactivar el turismo en Guerrero es una prioridad que requiere el compromiso y la acción conjunta del gobierno, la iniciativa privada y la sociedad en su conjunto. Es momento de trabajar para superar los desafíos y aprovechar las oportunidades que ofrece esta industria para el crecimiento y el desarrollo de nuestra querida tierra guerrerense.
