Infinidad de cadáveres putrefactos hay en el Servicio Médico Forense (Semefo) que ya no caben en las cámaras frigoríficas, por esa razón hay cuerpos tirados en el piso.
Uno de los trabajadores dijo que la mayoría de los cadáveres tienen el sello de la violencia, sin precisar la cantidad, pues hay decapitados, desmembrados y con impactos de bala, los que no han sido identificados por sus deudos.
Por esta razón la Fiscalía General dio órdenes para que se les hagan los estudios de ADN para facilitar la identidad por parte de las personas que buscan a sus seres queridos.
Informaron que los cuerpos son de Acapulco, San Marcos y Coyuca de Benítez, que están en avanzado estado de putrefacción.