/ miércoles 25 de julio de 2018

América Latina, letal para activistas ambientales: ONG Global Witness

Global Witness informó que 207 activistas fueron asesinados en 22 países durante 2017, el año más sangriento registrado por esta organización

PARÍS, Francia. Por haberse opuesto a proyectos mineros, forestales o agroindustriales, al menos 207 personas murieron en el mundo en 2017, de las cuales casi un 60% en América Latina y especialmente en Brasil, según la ONG Global Witness.

Este balance contabilizado en 22 países está sin duda por debajo de la realidad, según el informe "¿A qué precio?", publicado por la organización británica. La cifra supera además el récord de 2016, con al menos 200 muertos.

Las víctimas eran líderes locales, responsables de proteger la fauna salvaje o "personas corrientes" que defendían sus tierras. Brasil registró el peor balance, con 57 muertos, con tres masacres en las que fallecieron 25 personas.

Detrás del segundo país, Filipinas (48, un récord para un Estado asiático), figuran en la lista Colombia, con 24 muertos, y México, con 15. Global Witness alerta sobre el incremento espectacular de muertes en México (sólo tres en 2006), donde el "aumento del crimen organizado, la impunidad continua y el fracaso del gobierno en proteger" a los defensores del medio ambiente ha llevado al "brutal silenciamiento" de quienes se oponen por ejemplo a la explotación maderera o a la minería.

Perú también registró un salto significativo, de dos a ocho muertos en un año, mientras que con respecto a su población, Nicaragua fue el más afectado (cuatro).

En cambio, en Honduras, el número de muertos bajó de 14 en 2016 a cinco en 2017, si bien "la creciente represión de la sociedad civil ha restringido lo que las personas defensoras pueden decir y hacer", según el informe, cuya actividad inició en 2002.

En total, uno de cada cuatro homicidios en el mundo (al menos 46, el doble que en 2016), estuvieron vinculados con la industria agroalimentaria. Cuarenta debido a disputas mineras (33 en 2016), 26 relacionadas con la deforestación y un récord de 23 personas, sobre todo guardias forestales africanos, murieron tratando de proteger a los animales de cazadores furtivos.

También se produjo un recrudecimiento de la violencia contra quienes defienden sus tierras frente a una agricultura "destructiva", según la ONG, que critica a los gobiernos "negligentes" y a las empresas "irresponsables" por anteponer "a la vida humana" los beneficios y la demanda de los consumidores.


PARÍS, Francia. Por haberse opuesto a proyectos mineros, forestales o agroindustriales, al menos 207 personas murieron en el mundo en 2017, de las cuales casi un 60% en América Latina y especialmente en Brasil, según la ONG Global Witness.

Este balance contabilizado en 22 países está sin duda por debajo de la realidad, según el informe "¿A qué precio?", publicado por la organización británica. La cifra supera además el récord de 2016, con al menos 200 muertos.

Las víctimas eran líderes locales, responsables de proteger la fauna salvaje o "personas corrientes" que defendían sus tierras. Brasil registró el peor balance, con 57 muertos, con tres masacres en las que fallecieron 25 personas.

Detrás del segundo país, Filipinas (48, un récord para un Estado asiático), figuran en la lista Colombia, con 24 muertos, y México, con 15. Global Witness alerta sobre el incremento espectacular de muertes en México (sólo tres en 2006), donde el "aumento del crimen organizado, la impunidad continua y el fracaso del gobierno en proteger" a los defensores del medio ambiente ha llevado al "brutal silenciamiento" de quienes se oponen por ejemplo a la explotación maderera o a la minería.

Perú también registró un salto significativo, de dos a ocho muertos en un año, mientras que con respecto a su población, Nicaragua fue el más afectado (cuatro).

En cambio, en Honduras, el número de muertos bajó de 14 en 2016 a cinco en 2017, si bien "la creciente represión de la sociedad civil ha restringido lo que las personas defensoras pueden decir y hacer", según el informe, cuya actividad inició en 2002.

En total, uno de cada cuatro homicidios en el mundo (al menos 46, el doble que en 2016), estuvieron vinculados con la industria agroalimentaria. Cuarenta debido a disputas mineras (33 en 2016), 26 relacionadas con la deforestación y un récord de 23 personas, sobre todo guardias forestales africanos, murieron tratando de proteger a los animales de cazadores furtivos.

También se produjo un recrudecimiento de la violencia contra quienes defienden sus tierras frente a una agricultura "destructiva", según la ONG, que critica a los gobiernos "negligentes" y a las empresas "irresponsables" por anteponer "a la vida humana" los beneficios y la demanda de los consumidores.


Local

Incendios acaban con cientos de hectáreas de pastizal en Acapulco

Familias de las partes altas del puerto viven entre nubes de humo, cenizas y el intenso olor a quemado

Local

Cierran escuelas privadas por crisis y caída de matrícula escolar

Tres grandes instituciones educativas con historia en el puerto, cerraron sus puertas tras el paso del huracán Otis

Estado

Llama Iglesia a rechazar la violencia y construir la paz

El Episcopado de México dijo que no se puede ignorar la preocupante realidad que enfrenta la sociedad con la existencia de una cultura de muerte y violencia

Estado

Ofrecen recompensa de 10 mil pesos para ubicar a "Oso"

El lomito en situación de calle deambula por las calles de Chilpancingo con el hocico amarrado con un cable de cobre

Estado

Suspenden clases por segundo día debido a incendios forestales

Debido a la contaminación atmosférica, la Secretaría de Educación en Guerrero determinó suspender actividades en todos los planteles de nivel básico en los municipios de Acapulco y Chilpancingo

Elecciones 2024

Grave, la participación de la delincuencia en las elecciones: Xóchitl Gálvez (Entrevista)

En entrevista con la casa editorial OEM, Xóchitl Gálvez habló sobre sus propuestas y cómo piensa atraer los votos para su causa