Con aplausos y entonando el mariachi “La Cruz de Olvido”, se dio el último adiós al que fuera secretario de Turismo Municipal, Alejandro González Molina, quien falleciera este lunes por la madrugada por un paro cardiaco a los 71 años de edad.
Al mediodía todo el gabinete municipal se integró a esta ceremonia luctuosa, que se realizó en la sala de cabildo “Juan R. Escudero” del Palacio municipal del Parque Papagayo, a la que se sumaron amigos y familiares del que fuera secretario de Turismo municipal, cuyos restos llegaron a las 14:35 horas de este martes.
Acompañado por el mariachi que interpretó “A mi manera”, ingresó el féretro al recinto, en medio de aplausos prolongados, en donde se colocaron flores y se montaron guardias de honor, por parte del alcalde Evodio Velázquez Aguirre y su esposa Perla Edith Martínez de Velázquez, así como de los familiares de González Molina.
El subsecretario de Promoción de la Secretaría de Turismo Municipal, Carlos Felipe González Ocampo hizo una semblanza del finado, del que dijo fue un hombre ejemplar y hablar de él, era sumergirse en un océano inmenso, de historias y experiencias, pero también porque su amor por Acapulco fue incomparable.
Lo recordó como un incansable promotor del turismo en Acapulco, Guerrero y en México, porque este 30 de abril a sus 71 años de edad se desempeñaba como secretario de Turismo, con amplia experiencia ocupó diversos cargos, entre estos dos veces secretario de Turismo en el estado y fue quien concluyó con la constitución legal de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (AHETA).
Mientras que el alcalde Evodio Velázquez Aguirre también expresó su reconocimiento al trabajo que desarrolló como Secretario de Turismo y contó la forma en cómo lo conoció y tener la dicha de encontrarlo en su camino.
“Hoy me toca despedirlo, pero más bien decirle hasta pronto, este gobierno municipal que me toca encabezar, debo de reconocer al gran ser humano que fue, de gran arrojo, solidario y que abrió su corazón a muchos jóvenes para compartirle sus experiencias”, dijo.
Por su parte, Alejandro González hijo, agradeció este detalle y este regalo que les dieron, que les conmueve por el cariño que le tuvieron a su padre y que seguirá iluminando esa estrella al puerto de Acapulco, como siempre fue su sueño.
De ahí vinieron aplausos prolongados y la despedida con la música de mariachi y por la banda de música del Ayuntamiento, que también se sumaron al último a dios al secretario de Turismo, Alejandro González Molina.
