El presbítero Juan Carlos Flores Rivas pidió a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y a la alcaldesa Abelina López Rodríguez, su apoyo para limpiar el camino del cerro El Encinal y poder realizar la misa de Cristo Rey de la Paz.

Por más de 40 años, en el cerro del Encinal, en el ejido de Carabalí, la iglesia católica realiza en la escultura de 5 metros de altura la celebración de la fiesta litúrgica de Cristo Rey de la Paz, a finales del mes de noviembre.

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Este año no será la excepción sin embargo, para poder llegar hasta la cúspide tendrán que caminar más de 500 metros los feligreses, debido a que el camino “está muy dañado” por sufrir un gran deslave a causa de las lluvias.

Por ello, señaló el párraco Juan Carlos Flores Rivas que la participación de los devotos será poca por no poder llegar en vehículo hasta la celebración de la eucaristía, “cuando el camino está buenas condiciones, suben hasta personas enfermas”.

“Espero que la gobernadora o la alcaldesa nos manden maquinaria para poder rastrillar el camino y puedan subir los carros sin problema, sólo es un punto en una curva donde impide el paso vehicular” explicó Flores Rivas.

El padre pidió a los que lo acompañaran que lleven calzado cómodo, gorras, sombreros y sombrillas para cubrirse del sol, así como bebidas y alimentos para posterior a la misa tener una convivencia y apreciar de la única y majestuosa vista del puerto de Acapulco.