El presidente del Consejo Coordinador Empresarial en Guerrero, Joaquín Badillo Escamilla, lamentó que la clase empresarial continúe sin percibir apoyos del gobierno federal, ya que la reapertura del 30 por ciento de las actividades no esenciales es insuficiente insuficiente para mantener a flote los negocios.
El dirigente empresarial aseguró que la situación económica de las empresas es difícil debido a que tienen un déficit del 70 por ciento, mismo que se ha generado por el pago de impuestos que no cede del gobierno de la República, como el pago del IMSS, SAT, así como servicios.
Badillo Escamilla recordó que fueron miles las empresas que no resistieron los primeros meses del cierre de actividades no esenciales, debido a que sólo el gobierno del estado realizó un descuento del 50 por ciento en el impuesto sobre la nómina, mientras que no el Ayuntamiento quiso aplazar el pago del recibo que reparte la CAPAMA.
"Desafortunadamente los adeudos al SAT, IMSS, los créditos, pago de proveedores, pago de servicios como electricidad, nos han llevado a que el 20 o 30 por ciento de las empresas ya no pudiera abrir, mientras que un porcentaje similar a un gran esfuerzo para la reapertura, pero los resultados no han sido suficientes, pues los gastos de operación son mayores que los ingresos", dijo.
El presidente del CCE alertó que si los órdenes de gobierno no apoyan a las micro y pequeñas empresas que mantienen la mayoría de los empleos en Acapulco, las cifras de desocupación pueden ascender mucho más.