Designar a un militar para ser Fiscal General del Estado en una entidad como Guerrero donde la milicia tiene negros antecedentes por violaciones a Derechos Humanos es un grave retroceso que nos coloca en una situación peor a la que se tenía cuando estaban los gobiernos del PRI, señaló el abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra.
Indicó que la designación del nuevo fiscal se proyectó e inició como un ejercicio democrático y transparente, abierto a la sociedad, sin embargo, después lo opacaron y no hubo un debate importante que debió tenerse para, primero para determinar qué tipo de fiscalía se requiere en Guerrero, cuál es la estructura que la fiscalía debe tener para enfrentar los retos de suma violencia e impunidad que prevalecen en Guerrero, las condiciones de falta de acceso a la justicia y mucha corrupción.
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“Finalmente la designación recayó en una decisión unilateral de la gobernadora Evelyn Salgado como parte de sus atribuciones y facultades que de acuerdo con la normativa es legal, pero no está dotado de un amplio debate respecto de las víctimas, respecto de la sociedad, respecto del fiscal que las víctimas necesitan”.
El también representante legal de los padres de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa estableció que se ve correcto designar a una mujer como nuevo Fiscal, pero su perfil militar no le hace bien a nuestro país y viene a confirmar la intención del gobierno de militarizar las instituciones, militarizar la vida pública y todo el país.
Recordó que en Guerrero se tienen un negros antecedentes del actuar del Ejército, y puso como ejemplo el caso de los ecologistas de Petatlán que fueron torturados por militares; la masacre del Charco en el que los responsables fueron militares; las violaciones sexuales de las indígenas Valentina Rosendo Cantú e Inés Fernández, en el que los responsables también fueron militares; en el caso de la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa también la responsabilidad apunta a militares.
“Ha sido seriamente lastimado el estado de Guerrero por la militarización histórica que nuestro estado a sufrido entonces que vengan y nombren a un fiscal militar me parece que es un retroceso un paso hacia atrás en la construcción de la democracia y no va a tono con un gobierno que se dice progresista, en pocas palabras estamos peor que con el PRI”.
