El zoológico Zoochilpan es un sitio emblemático en Chilpancingo, que sobrevive y no pasa por su mejor momento a 44 años de abrir sus puertas.
Quienes visitan sus instalaciones son principalmente estudiantes y lugareños, en una ciudad con escasos sitios de recreación y convivencia.
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El inmueble no ha sufrido cambios radicales en los últimos años, y las principales mejores han sido las adecuaciones en el área de felinos y en las rejas de animales.
Este lugar abrió sus puertas en 1978, inaugurado en ese entonces por el gobernador Rubén Figueroa Figueroa, y nació con el fin de promover la habían y conservación de flora y fauna de especies de Guerrero.
Este espacio es el hogar de decenas de animales, desde tortugas hasta una jirafa, pasando por jaguares, venados, cebras, guacamayas y cocodrilos.
También es la casa de Chucho-Chucho, un chimpancé de unos 70 años de edad, que fue estrella del cine mexicano en los años setenta.
En los últimos años, han desaparecido el paseo en calandria y el serpentario, que eran de los principales atractivos del lugar.
Por otra parte, sigue funcionando el taller de pintura y dibujo, que se ha vuelto en toda una actividad tradicional y obligada para cualquier visitante, ya sean chicos o grandes.
Por otra parte, se han incorporado nuevos atractivos, como la renta de cuadriciclos, paseo en trenecito, siendo la última sensación un Oso Americano, al cual todos los visitantes quieren fotografiar para el recuerdo.
La entrada tiene un costo de 10 pesos y las personas que lo visitan apenas dan vida al lugar que se ha identificado últimamente por los fuertes olores a excremento de los animales.
El area de juegos esta en pésimas condiciones, por lo que es la otra opcion es un area de carros chocones destinada a ninos.
El zoológico Zoochilpan no cuenta con recursos propios y vive de las aportaciones que hace la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero.