Seguir debilitando grupos delictivos, compromiso de PGR

Alberto Elías Beltrán, ratificó el compromiso para seguir debilitando a los grupos delictivos en México.

Carlos Moreno A.

  · viernes 21 de septiembre de 2018

Al participar en la incineración de narcóticos en las instalaciones de la Fuerza Aérea en Pie de la Cuesta en Acapulco, el subprocurador jurídico y de asuntos internacionales en suplencia del titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Alberto Elías Beltrán, ratificó el compromiso para seguir debilitando a los grupos delictivos en México.

En su mensaje, señaló que con la destrucción de drogas y objetos delictivos decomisados en operativos de seguridad dan un “mensaje claro contra el crimen y en contra de las drogas. Drogas que hacen daño incalculable a la sociedad, y por eso debemos seguir a detalle el fenómeno delictivo a su alrededor”, comentó.

Acompañado por el gobernador Héctor Astudillo Flores y en el marco del programa “Bodegas Vacías”, Elías Beltrán explicó que acudió a esta entidad, con el fin de destruir diferentes narcóticos asegurados en los estados de Guerrero y Morelos.

Señaló que el problema de las drogas genera efectos negativos en términos de salud pública, cuestión social, de seguridad y justicia, lo que se traduce en pérdidas de vida.

Destacó que una de las acciones que realizan para reducir la oferta y la demanda de las drogas en México, es precisamente la destrucción de instrumentos, objetos o productos del delito, resguardados en bodegas de indicios, lo cual, dijo, “desde hace cuatro meses con la puesta en marcha del programa de ‘Bodegas Vacías’, a través de nuestras delegaciones y en coordinación con otras autoridades, estamos agilizando el destino final”.

Aseguró que con esto disminuyen los riesgos de seguridad y salud para los servidores públicos encargados de resguardar esos objetos, a la par de liberar espacios físicos en sus instalaciones y reducir los costos de resguardo.

Asimismo, reiteró que ayer se destruyeron más de cuatro toneladas de cocaína, 468 kilogramos de marihuana y 54 unidades de psicotrópicos y diversos objetos, con lo que buscan “proteger la salud pública, golpear económicamente a los grupos delictivos y mejorar las condiciones de seguridad”.