Habitantes de la comunidad de Puerto las Ollas, situada en la sierra del municipio de Coyuca de Catalán, lanzaron una alerta pare pedir ayuda humanitaria y clamar al gobierno que les brinde seguridad pues han recibido amenazas en el sentido de que grupos de la delincuencia organizada incursionarán para exterminarlos.

El secretario técnico de la Red de Organismos Civiles de Derechos Humanos, Manuel Olivares, denunció que desde la semana pasada los habitantes de esta población le han estado pidiendo que se emitan las alertas ante la amenaza de ataques por parte de grupos de la delincuencia organizada que tendrían en la mira además de Puerto las Ollas a comunidades como Tondonicua, el Nogal, Río Frio, La Barranca y San José pertenecientes a los municipios de Coyuca de Catalán y Petatlán.

La amenaza, dijo, es muy creíble debido a las circunstancias de pactos que existen entre grupos delincuenciales que operan en la región de Costa Grande y Tierra Caliente, de tal forma que los habitantes de las comunidades de la sierra se han quedado cercados, no pueden salir de sus pueblos.

Estableció que en esta zona serrana los familias históricamente se han dedicado a la siembra de amapola misma que venden para obtener dinero y así mantener a sus familias, sin que ellos pertenezcan a ningún cartel delincuencial, “ellos son campesinos y lo que les tocó sembrar es amapola y en este momento enfrentan doble problema, primero una crisis por la caída del precio de la goma, adicionalmente a la falta de compradores, pues al ser productores independientes no tienen forma de comercializar el producto y ello los ha llevado a una situación de crisis alimentaria”.

Manuel Olivares indicó que en sus comunicaciones, los habitantes de Puerto las Ollas le han pedido que llame al gobierno para que el ejército se despliegue en este lugar y con ello impida que los grupos delincuenciales incursionen y los ataquen.

En la sierra las tiendas están desbastecidas, y si no existe una intervención pronta de la autoridad pronto se tendrá un problema de desplazamiento forzado o de agresiones en las que se tenga que lamentar la pérdida de vidas.