Sin recibir una sentencia definitiva, el defensor de bosques Martín Cruz Avellaneda cumplió 22 años recluido en el Centro de Reinserción Social de Coyuca de Catalán, acusado por el delito de secuestro.
Para el activista, su único delito fue el de ser un defensor del medio ambiente y del agua, esto al ser parte de la organización Campesinos Ecologistas de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán.
Fue detenido el 12 de mayo de 2001, fue detenido en Coyuca de Catalán, en la Tierra Caliente de Guerrero, acusado por el delito de secuestro, un acusación fabricada por el gobierno estatal, señaló.
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Vía telefónica desde la cárcel, Cruz Avellaneda señaló que no cuenta con dinero para poder pagar abogados que puedan llevar su caso.
En contraste, cuenta con apoyo jurídico de oficio, quienes le piden que se declare culpable para que puedan ayudarlo, lo que el rechaza, porque asegura que no cometió ningún delito.
Desde ese lugar, señaló que se debe de continuar la lucha por los montes y los mantos acuíferos, y dijo que en el tema del ambiente “si es posible, dar la vida por ellas”.
Aparte de Cruz Avellaneda, hay más detenidos de la organización de Campesinos Ecologistas de la Sierra de Petatlán y Coyuca de Catalán, por lo menos seis.
En la actualidad, es en la sierra donde más se ha reportado la explotación desmedida de recursos maderables, lo que ha provocado el desplazamiento de pobladores que habitan cerca de esas zonas.
