A la sombra del Covid-19, Guerrero recibe al 2021

Sin gala pirotécnica y con cierre de playas, turistas y guerrerenses festejarán bajo las nuevas medidas sanitarias para evitar el incremento de contagios

Celso Castro | El Sol de Acapulco

  · jueves 31 de diciembre de 2020

Martín Gómez | El Sol de Acapulco

A unas horas de concluir el 2020, se reporta listo el operativo para impedir el ingreso de los turistas a las playas del puerto de Acapulco, como parte de las medidas sanitarias que se implementarán para evitar aglomeraciones y los contagios de Covid-19.

Este año que termina, no sólo deja una estela de tragedia y muerte, sino también un festejo de año nuevo atípico, debido a que no habrá gala de pirotecnia y se impedirá con el apoyo de la fuerza pública de los tres niveles de gobierno que a partir de las 7:00 de la noche se ingrese a la franja de arena.

El objetivo es evitar la propagación de contagios de coronavirus por las aglomeraciones, en virtud que han arribado miles de turistas provenientes de la Ciudad y Estado de México, así como Morelos donde están en semáforo rojo para celebrar el año nuevo, pero la mayoría no respeta los protocolos sanitarios, como el uso del cubrebocas y guardar la sana distancia.

Por ello, efectivos del Ejército, Marina, Guardia Nacional, policías estatales y municipales, se desplegarán por toda la bahía y retiraran a todas las personas que traten de ingresar a las playas, como tradicionalmente lo hacían año con año.

El operativo será hasta las 6:00 de la mañana del primero de enero, por lo que propios y extraños tendrán que celebrar en casa el festejo de año nuevo, que deja una severa crisis económica y desempleo, provocada por la pandemia del Covid-19.

Guerrero se encuentra en semáforo naranja y cada día reporta nuevos casos positivos del patógeno, por lo que las autoridades del sector salud, implementan medidas más drásticas para evitar regresar al color rojo y que se vuelva a paralizar la economía.

El cierre de las playas se mantendrá hasta el 10 de enero, de acuerdo a lo declarado por el gobernador Héctor Astudillo Flores, aunque surge la duda de cómo se evitará la avalancha de turistas que abarrotaran las playas para degustar el recalentado y continuar con el festejo de año nuevo, pues habrá aglomeraciones y el alto riesgo de que se disparen los contagios de Covid-19.

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