El periodo de vacaciones de Semana Santa, es de oportunidades para ganarse un extra, dice Juan Andrés, quien al lado de su esposa vende chilate a la orilla del mar.

Instalado en la playa El Golfito, ofrece esta deliciosa bebida hecha a base de cacao, arroz y canela, a los turistas que llegan a refrescarse en la playa.

Para atraer a los clientes colocó una bocina en el tronco de un árbol, en la que pone música disco de los 70's, para ambientar el lugar y atraer a los clientes a su puesto semifijo.

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Presume que tiene 20 años en el negocio y de aquí saca para el sostén de su hogar, pero también para cubrir los gastos de los estudios de sus hijos.

Sin dejar de trabajar, Juan Andrés, revela que el negocio lo atiende junto con su esposa, ella se encarga de llevar los pedidos hasta donde se encuentre el cliente y cobra.

Confiesa que antes se dedicaba a trabajar en los hoteles, pero después pensó en poner un negocio propio y se dedicó a la venta del chilate, le va mejor, porqué es su propio patrón.

A pregunta de cómo le ha ido en esta temporada de Semana Santa, se resiste dar datos y solo atina a revelar que más o menos, pero confío que haya más turistas en lo que resta de la temporada de vacaciones y venda un poco más de chilate.