Empresarios de distintos sectores de Acapulco, solicitaron a los diputados locales de la 62 legislatura, que reconsideren el retiro de los caballos que tiran de las calandrias sobre la avenida costera Miguel Alemán, debido a que se perderá un atractivo turístico más del puerto.
En conferencia de prensa, propietarios de restaurantes, empresas publicitarias, entre otras, advirtieron que la posible puesta en marcha de la Ley de Bienestar Animal quitará fuentes de empleo para cientos de familia de toda la cadena de producción que percibe ingresos por la actividad, debido a que un vehículo motorizado no será un atractivo visual para los turistas.
El presidente de Cabalgantes Unidos del Estado de Guerrero (CUEG) y también ganadero, Alfredo Campos Tabares, reconoció que muchos de los equinos utilizados para la mencionada actividad están en mal estado, por lo que recomendó una regulación en lugar de quitarlos de un tajo, debido a que el destino que tendrán los animales aún es incierto y podrían quedar desprotegidos.
“Nos da un poquito de tristeza las condiciones que tienen los caballos y yo haría el llamado a la gente de las calandrias, porque yo sé que son gente acapulqueña, gente que trabajan ahí, que dan chamba a mucha gente, que es una cadena, si a ellos los quitan ya no va a vender el del alimento, ya no va a trabajar el herrador que le trabaja y lo peor, que esos caballos van a quedar olvidados”, dijo.
Los representantes destacaron que en otros lugares como en Mérida, Yucatán las calandrias son un atractivo turístico por tradición, así como en Guadalajara donde ya volvieron los caballos a tirar de los carruajes, mientras que, en Cartagena, Colombia son un patrimonio.
Además, el empresario Joaquín Salgado ofreció la construcción gratuita de caballerizas dignas para la preservación de los animales y urgió a las organizaciones defensoras de animales que reconsideren su parecer y que, en lugar de sugerir el retiro de los caballos, aporten recurso económico para mejorar su condición de vida.
Cabe mencionar que en el mes de julio del 2014 se aprobó la mencionada ley, con la cual se prohíbe la utilización de los caballos para trabajar en lugares pavimentados, sin embargo, hasta la fecha ésta no se ha hecho cumplir.
