A pesar de la proliferación de múltiples puntos negros de basura en distintas zonas de Acapulco, la Secretaría de Salud de Guerrero no ha emitido una emergencia sanitaria como lo hizo en el gobierno perredista de Evodio Velázquez Aguirre, cuando se dio un caso similar en agosto del 2018.

En distintas redes sociales habitantes del puerto convocaron a la sociedad en general para trasladar los desechos sólidos que la alcaldesa pretende guarden en sus casas hasta que pase el camión recolector de basura y depositarlos afuera del ayuntamiento porteño.

Ante estos amagos, el gobierno de Acapulco anunció la puesta en marcha de un operativo emergente para que con apoyo de empresas y funcionarios municipales iniciarán el retiro de los desechos sólidos para trasladarlos al relleno sanitario.

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Y es, que la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, dijo que ya no hay dinero para pagar a las empresas recolectoras de basura.

A pesar del anuncio de que habrá un operativo especial de recolección de basura y que inició esta mañana, no ha sido suficiente y en distintos puntos de la ciudad principalmente de la periferia continúan estos focos de contaminación.

Consultado al respecto el secretario de Salud, Carlos de la Peña Pintos, no ha dado a conocer la postura de la Secretaría de Salud ante el riesgo sanitario en que se encuentra la población por los desechos sólidos que se acumulan a lo largo de la ciudad.

En la administración de Evodio Velázquez Aguirre se presentó un problema similar donde sí se decretó una emergencia sanitaria e incluso en los puntos donde se tenía grandes cantidades de basura personal de salud rocío cal para evitar que se generará una contaminación mayor.

Algunos políticos se han sumado a la recolección de basura con vecinos de unidades y aportarán recursos económicos y materiales para llevarse los desechos.

Debido al sismo del 7 de septiembre, habitantes de Acapulco han sacado más desechos de sus viviendas, luego de haber sufrido daños.