A casi dos años de haber sido detectados dos tiraderos clandestinos con residuos biológicos infecciosos en Acapulco, autoridades de gobierno no han aplicado la ley en contra de quienes han puesto el riesgo de contagio a miles de familias .
El pasado 29 de mayo de 2020, personal de Ecología municipal ubicó dos predios a cielo abierto en la zona de Llano Largo, con restos de material infeccioso como bolsas con sangre, jeringas y mangueras de sueros.
Así como batas de uso médico, algodones utilizados, cajas de medicamentos caducados y guantes que son de alto riesgo de salud pública.
De acuerdo a la ley federal, la Procuraduría Federal Protección al Ambiente (Profepa) debe de proceder con sanciones y multas en contra de hospitales públicos, privados y clínicas que provocan este tipo de tiraderos de residuos biológicos
La ley general de salud publicada en julio del 2014, determina inhabilitación, prisión y multa a quienes violen la norma del manejo de residuos hospitalarios y de laboratorios considerados como infecciosos.
En Acapulco fueron dos los predios detectados por la Dirección de Ecología, cada uno de estos de aproximadamente dos hectáreas donde se arroja este tipo de desechos sin ninguna medida de prevención.
Cerca de estos tiraderos clandestinos hay viviendas donde habitan miles de familias, negocios comerciales y escuelas privadas a las que asisten menores de edad.
A nivel nacional, los hospitales, clínicas y laboratorios generan a diario 191 mil 557.5 kilogramos de residuos peligrosos, de estos más del 50 por ciento no se les da el destino final adecuado que tiene que ser un incinerador o de lo contrario en una empresa certificada para su traslado.
La Dirección de Ecología inició un procedimiento administrativo que emitió a la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente el mes de mayo del año pasado, sin embargo, hasta el momento no se tiene ninguna investigación sobre el caso, por lo que los dos predios, uno ubicado en la Calle "Chupín" del poblado de Llano Largo, siguen siendo una fuente de peligro para los habitantes.
Las sanciones para los responsables de los tiraderos clandestinos de desechos infecciosos son de 40 a 50 mil veces la Unidad de Medida y Actualización (UMS), lo que equivale a más de 4.3 millones de pesos.
Además de la revocación, suspensión temporal, parcial o definitiva de los permisos o licencias para funcionar como hospitales, clínicas o consultorios.
Para evitar sanciones se debe contratar una empresa certificada por las autoridades para el manejo de los residuos peligrosos y que se encuentren apegadas a las notas NOM-005-SEMARNAT-200 y la NOM-055-SEMARNAT-2005.
En la zona de Llano Largo se ubica un hospital público, clínicas particulares y laboratorios de análisis clínicos, que no cuentan con los sistemas que marca la ley de medio ambiente y de salud para el tratamiento de los residuos biológicos infecciosos que generan diariamente.
La norma oficial NOM-087-SEMARNAT-SSAI-2002, establece la clasificación de los residuos peligrosos infecciosos.