La falta del servicio de agua potable que se tiene en todo Acapulco desde hace más de quince días, no sólo ha afectado a miles de familias acapulqueñas que viven en más de 450 colonias populares, sino también a cientos de propietarios de negocios establecidos que se han visto obligados a adquirir servicios de pipas particulares para contar con el vital líquido en sus negocios.
De acuerdo a los propios comerciantes ubicados en el primer cuadro de la ciudad, los gastos económicos en sus negocios han aumentado en las últimas dos semanas debido a que han requerido hasta de dos servicios de pipas de diez mil litros cada una a la semana para poder seguir manteniendo algunos servicio como sanitarios y áreas de lavado y comedores de los trabajadores.
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El costo económico de una pipa de diez mil litros de agua es de mil 200 a mil 400 pesos y en dos servicios en una semana, representa un gasto de dos mil 400 a dos mil 800 pesos, indicó Arturo López Rodríguez, administrador de una tienda comercial ubicada en el centro de Acapulco, quien hizo un llamado para que la CAPAMA reinicie la distribución del vital líquido que desde hace más de dos semanas fue suspendido por supuestas afectaciones que provocó el sismo magnitud 7.1.
El comerciante indicó que en algunos negocios del centro como hoteles y los grandes restaurantes el número de servicios de pipas particulares es superior a los dos o tres a la semana y esto aumenta el gasto económico que deben de hacer los empresarios para contar con el servicio.
Indicó que es un gasto económico elevado y doble estar comprando pipas, ya que en su mayoría los propietarios de los negocios pagan de manera puntual los recibos mensuales a la CAPAMA, los cuales tienen costos mayores a los mil, dos mil y hasta cinco mil pesos por ser servicios comerciales.
La suspensión de agua potable se tiene desde hace más de dos semanas en todo el primer cuadro de la ciudad.
