La mansión del comediante más famoso de México Mario Moreno “Cantinflas”, está en ruinas, deteriorada por años de abandono, la salinidad y la falta de mantenimiento son las causas principales que la propiedad corra el riesgo de derrumbarse.
Ubicada en el Fraccionamiento Las Playas del puerto de Acapulco, el inmueble lucha por subsistir al deterioro que sufre desde que murió el mimo mexicano en 1993, la cual hoy en día está a la venta, pero los adeudos millonarios que arrastra por pago de más de 20 años del predial, consumo de luz eléctrica y agua, ha sido un factor que impiden su remate.
La casa fue heredada por la nieta de Cantinflas, Tita Marbez, quien de acuerdo a lo que se ha manejado en algunos medios de información está valuada en 13 millones de dólares, aunque aclaró que no le pertenece porque se vendió a finales de los 80´s.
Sin embargo, sí confirmó que fue propiedad del creador de la frase “Ahí está el detalle”, la cual está deshabitada, a pesar de que tiene una vista panorámica de la bahía, dos albercas y un tobogán con imagen de guitarra, así como un acceso a la playa, pero destaca la enorme figura gigante del artista con su singular pose, en el muelle.
La única forma de acceder a la casa de Cantinflas es en pequeñas embarcaciones, tal y como lo vienen haciendo curiosos y turistas, que desembarcan brevemente para tomarse fotografías al lado de la imagen del cómico mexicano, dando cuenta del deterioro que sufre el inmueble, que se ha documentado que carece de una parte del techo.
Hasta donde se ha podido llegar, todo está en ruinas, hay palmeras descuidadas y el muelle empieza a representar un peligro, en virtud que, por el fuerte oleaje, se está cayendo a pedazos, así también el muro de piedra está en las mismas condiciones, a punto de colapsar por la salinidad y el abandono.
De acuerdo a reportes periodísticos, Mario Moreno Cantinflas, compró la casa en la década de 1950, en esta zona exclusiva de Acapulco, frente al mar, para usarla durante el verano y días de descanso después de terminar la filmación de cada película.
Sin embargo, al morir en 1993, la propiedad fue quedando en el olvido, a tal punto que hoy es un lugar abandonado, se puede apreciar a la distancia algunas pinturas sobre los muros, murales de diversos peces y algunas figuras de sirenas, así como de otros personajes mitológicos, que también sufren el paso del tiempo.
La mansión, del humorista mexicano, ganador de un Globo de Oro como mejor actor de comedia musical, está a punto de sucumbir por el abandono, que de ocurrir se perderá una parte de la historia del que fuera el icono de la comicidad de México, del gran Mario Moreno Cantinflas.
