Tras las denuncias en redes sociales de que personas extrañas rentaban especies marinas muertas para la toma de fotografías a turistas en playas de la zona tradicional de Acapulco, personal de la PROFEPA implementó operativos de vigilancia por la zona de Caleta y Caletilla a fin de sorprender en infraganti a estos sujetos.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, advirtió que esta práctica es un delito y ha sido exhibido en redes sociales, sobre todo por el manejo de especies como tiburón, cocodrilo y otros, por lo que quienes realicen esto deben ser puestos a disposición de las autoridades federales.
En este operativo los inspectores de la Profepa se hicieron acompañar por elementos de la Marina Armada de México, Policía Turística y municipal, para en caso de localizar a estas personas poder arrestarlas y presentarlas ante la autoridad, sin embargo, hasta el momento no se ha detectado a nadie realizando esta actividad ilícita.
Recordaron que el Código Penal Federal en su artículo 420 señala que se impondrá una pena de uno a nueve años de prisión y por el equivalente de trescientos a tres mil días de multa a quien ilícitamente, capture, posea algún ejemplar de especie de flora o fauna en peligro de extinción sujeta a protección especial.
Por ello, advirtieron que continuarán los operativos de manera sorpresiva e invitaron a la población a continuar denunciando estos actos ilícitos donde quieran que se cometan, así como el consumo y robo de huevos de tortuga, que se dan más en las playas de la zona Diamante de Acapulco.
