Integrantes del colectivo Familias de Acapulco en busca de sus Desaparecidos se manifestaron a las 8:00 de la mañana en la franja turística donde se encontraban pintados los 53 rostros de sus familiares en la pared del restaurante Los Anafres ubicado en la playa Papagayo en la costera Miguel Alemán.
Con pancartas en mano y vistiendo playeras blancas la asociación que representa a 314 familias exigió una explicación de porqué el gobierno borró el mural donde están sus familiares desaparecidos, sin el consentimiento del propietario del negocio y del colectivo.
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María Emma Mora Liberato, presidenta de la asociación, mostró su indignación por tal acto dijo que el único objetivo del mural es que las familias y visitantes lo vieran para que de alguna manera pudieran identificarlos y “darles unas líneas de investigación que tal vez ellos no conozcan y así poderlos ubicar”.
Lamentó que la autoridad pretenda callarlos y esconder lo que sucede en el puerto “no quieren que se sepa que en Acapulco se corre sangre todos los días, en Acapulco hay desaparecidos todos los días, aquí lo único que nos interesa es localizarlos, el estado mexicano no hace nada por buscarlos”.
Detalló que las familias se han empoderado y a pesar de tener dolor se han capacitado y aprendido muchas cosas que desconocían como cuestiones jurídicas y forenses con el fin de que las autoridades no les digan mentiras y decir cómo se deben hacer las cosas.
Informó que durante el 2021 han localizado 25 cuerpos esqueletizados y restos óseos, y con vida a 8 jovencitas y 2 señoras.
Mora Liberato señaló que el mural fue realizado con recursos de una organización internacional y de la asociación, “ni con dinero del gobierno federal, estatal, ni mucho menos municipal, pero no nos callarán, no es novedad que siempre nos quiten nuestras lonas”.
Añadió que repararán las imágenes de los rostros de los desaparecidos y llamaron a la sociedad civil para que los apoyen con donaciones de pintura, laca, andamios y pintores y vigilarán para que no se los vuelvan a quitar.
Resaltó sentir miedo, tristeza sin embargo, dijo que lo único que desean es encontrar a sus familiares “no nos interesa saber que les hicieron, quién y porqué”.
Reiteraron que con los rostros pintados no afectan al turismo, “pase lo que pase el turistas viene a Acapulco”.
