Con desesperación y angustia, es como viven madres de niños enfermos con cáncer en el estado de Guerrero, debido a que el desabasto constante de por lo menos cuatro medicamentos oncológicos en el Instituto Estatal de Cancerología “Dr. Arturo Beltrán Ortega”, podría ocasionar que sus hijos sufrieran una recaída que pudiera ser fatal.
La señora Ofelia Ortiz, originaria del municipio de Metlatónoc, desde hace 2 años se encuentra apoyando a su hijo que fue detectado con Leucemia, llevándolo al IECAN ubicado en Acapulco para recibir el tratamiento, sin embargo, medicamentos como el L. asparaginasa, Cardioxane, Cytarabine, entre otros, han escaseado desde principios del 2019, cuando su hijo sufrió una recaída, pero desde hace dos meses cuando iniciaron los cambios en las políticas de salud del gobierno federal desapareciendo el Seguro Popular, el problema empeoró.
“Nosotros como padres queremos entender que es lo que está pasando porque nosotros escuchamos al presidente Andrés Manuel dice que no hay desabasto de medicamentos, pero aquí en el hospital no hay medicamentos, no hay quimioterapias y los niños están esperando, pero la enfermedad no espera”, dijo.
Ofelia Ortiz aseguró que, a principios del año 2020, la falta de medicamentos ocasionó que el tratamiento de su hijo Luis Eduardo, el cual debió haber recibido el pasado 9 de enero, se retrasara 11 días.
En la misma situación se encuentra la señora Patricia Hernández Nicolás, quien es originaria de Pinotepa Nacional, Oaxaca, aseguró que el problema de escasez, ha ocasionado que a su hija le cambien el medicamento en las quimioterapias, lo cual pone en riesgo el resultado del tratamiento, además de que en las últimas semanas ha tenido que conseguir pastillas de purinethol, medicamento oncológico que tiene un costo de alrededor de dos mil pesos y con el cual no cuenta el hospital infantil.
“Hace una semana le recetaron ese medicamento a mi hija y yo no tengo como comprarlo, pero le pedí prestada unas pastillas a otra señora y así se lo pude dar a mi hija”, aseguró con la mirada cabizbaja.
Por su parte, Griselda Brito quien reside en Apaxtla de Castrejón, aseguró que también se ha enfrentado con el desabasto en el Instituto Estatal de Cancerología, por lo que pidió a las autoridades de Guerrero y federales en materia de salud que “nos atiendan porque de verdad necesitamos el apoyo para nuestros niños”, debido a que tienen la ilusión de que se recuperarán de la leucemia a la que se están enfrentando.