Reporteros de diversos medios de comunicación se manifestaron frente a la sede del Poder Ejecutivo para demandar a los tres niveles de gobierno que se esclarezca el crimen de su compañero Alfredo Cardoso Echeverría, quien fue asesinado a balazos en el puerto de Acapulco, también le demandaron a la presidenta municipal porteña, Abelina López que deje de criminalizar a los medios de comunicación y respete la labor que realizan.
Con su protesta, los reporteros, que estuvieron encabezados por el secretario general de la delegación 17 del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa, Luis Salvador Blancas Rayo, se sumaron a la campaña que lanzó la Unesco por el Día Internacional para poner fin a la Impunidad de los Crímenes contra los Periodistas.
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El asesinato del reportero de Acapulco es el primero que se registra durante el gobierno de Evelyn Cesia Salgado Pineda, pero es preocupante porque se registró cuando la gobernadora apenas tenía 15 días en el cargo, lo que es un muy mal augurio para quienes se dedican a comunicar.
“La delegación XVII del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP), lanzamos un llamado apremiante a las autoridades que se encargan de impartir justicia en Guerrero y en el país, para que den una muestra de responsabilidad y no dejen un crimen contra compañeros en la impunidad”, señaló Luis Blancas Rayo.
Agregó que como reporteros de Chilpancingo y de Guerrero remarcaron que es urgente que se acabe con la impunidad en los crímenes de periodistas; “un asesinato no castigado, es una invitación expresa a cometer otro más y así acumular en la burocracia de las Fiscalía expedientes de compañeros que han sido víctimas de manos cobardes que les han quitado la vida”.
Recordó que en septiembre pasado entregó en medio de golpes y empujones un escrito dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador en donde le pedíamos que su gobierno hiciera un pronunciamiento en torno a la delicada situación que vivimos en Guerrero, quienes trabajamos en el periodismo, lamentablemente su clamor no fue escuchado y hoy se lamenta un crimen más y ahora en un gobierno de la llamada Cuarta Transformación.
“Nos tacharon de provocadores y sin embargo seguimos exigiendo que el gobierno de López Obrador haga un pronunciamiento en torno a los asesinatos y hechos graves como el desplazamiento forzado a consecuencia de la violencia del crimen organizado de compañeros reporteros de Zihuatanejo, de Acapulco, de Chilapa, de Iguala y de Chilpancingo; el crimen organizado no puede estar por encima del Estado mexicano”.
En ese documento se enlistan ocho periodistas asesinados durante el sexenio que encabezó Héctor Astudillo, que fueron Francisco Pacheco Beltrán, Cecilio Pineda Birto, Víctor Fernández Álvarez Chávez, Pamela Montenegro, Gabriel Soriano, Edgar Alberto Nava López, Erick Castillo Sánchez Kuri y Pablo Morrugares.
Finalmente, indicó que “La inacción del Estado para garantizar la seguridad para que las y los periodistas ejerzan su labor, ha provocado que regiones como la Tierra Caliente, la Sierra, y municipios como Chilapa, Iguala y Acapulco se hayan convertido en zonas de silencio”.
