La subsecretaroa del Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, informó que en próximas horas arrancará el censo que se realizará en zonas afectadas por el terremoto del pasado martes 7 de septiembre, para conocer qué tipo de daños sufrieron más de 8 mil inmuebles en Guerrero que dejó más de 15 mil damnificados.
Durante su participación en la actualización de casos Covid-19, la funcionaria del Gobierno Federal indicó que por instrucciones del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se llevará a cabo dicho censo por la preocupación que se tiene ante los daños a los guerrerenses para que puedan ser atendidos
Explicó que se hará un censo en las localidades que tengan algún daño e indicó que los apoyos se entregarán de manera directa sin intermediarios a las familias que presentan algún tipo de daño en sus viviendas.
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Precisó que en coordinación con el Gobierno del Estado y el delegado de Programas para el Desarrollo se hará una planeación, definirán los municipios y localidades de atención de acuerdo a la declaratoria de desastre que se emitió.
En el marco del censo, señaló, van a mapear a los territorios donde la Secretaría de la Defensa Nacional apoyará encabezando las acciones de coordinación a los trabajos de la emergencia que mantiene desde el inicio de la emergencia.
Abundó que se organizarán responsables por municipios y brigadas de diez personas para levantar un censo y llevarán un folio que es un formato sencillo que se va a llenar a mano.
Mencionó que cuando les den los datos de las casas afectadas se colocará un sello de vivienda censada y después se hará un diagnóstico y el presidente Andrés Manuel López Obrador determinará el tipo de apoyos que pueden ser económicos o en especie.
Expuso que también se analizarán otro tipo de daños que serán consultados entre los damnificados para saber si tuvieron otro tipo de daño en ganado o cultivos, drenaje o servicios básicos, por lo que pidió estar atentos a la visita del personal de la Secretaría del Bienestar.
Una vez realizado el proceso, detalló, las personas se quedarán con un talón que será su comprobante para demostrar que han sido censadas y luego van a capturar la información en un sistema y se irán mapeando los sitios donde se tienen daños por el terremoto.
Refrendó que empezarán por las zonas más críticas y estimó que en siete días puedan tener el censo terminado para dar una respuesta a las personas que fueron damnificadas por el terremoto, para posteriormente dar informes del tipo de apoyos que darán a la población.
