La conclusión del gobierno de Héctor Astudillo permitió destapar graves irregularidades que han cometido funcionarios del Programa Nacional de Inglés (Proni), que en el estado de Guerrero ha permitido que la coordinadora cobre por tres plazas que son incompatibles, mientras que a más de 500 trabajadores se les mantiene sin posibilidad de una recategorización.
Miriam Alejandra Romero Mendoza, indicó que por más de 20 años han trabajado con una plaza limitada con la que les pagan un salario muy pobre, y tiene candados que les impiden participar en concursos de promoción o recategorizaciones, por ello han luchado para que sus plazas sean cambiadas.
“La semana pasada nos enteramos que la coordinadora del PRONI, Gabriela García Cervantes, entregó de manera irregular decenas de plazas beneficiando a personal nuevo que obviamente son sus allegados, sus familiares o personas con quien tiene algún compromiso, violentando los lineamientos del programa”.
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Establecieron que las plazas debieron ser concursadas y para su otorgamiento se tendría que haber considerando la antigüedad de cada trabajador, el desempeño que ha mostrado, o al menos la presentación de exámenes de evaluación, pero no hubo nada todo lo entregaron por amiguismo, compadrazgo o conveniencia de la coordinadora.
“Hoy que ha entrado la nueva gobernadora demandamos que se destituya a la coordinadora y que se ordene una investigación integral de los recursos que se han manejado en este programa, que se audite la forma en que se entregaron las plazas y si se violaron normativas que se les aplique la norma que corresponda”.
Finalmente, la quejosa indicó que se ha programado tener una reunión con el secretario de Educación, pero si este no tiene capacidad de ofrecer respuesta se tendrán que tomar medidas extremas como la toma de oficinas del PRONI en Chilpancingo, Iguala Acapulco y otras ciudades.