Al menos cuatro habitaciones del hotel “Dalia Suite”, que fue clausurado ayer por autoridades de los tres niveles de gobierno, estaban habilitados con aparatos e instrumental médico en condiciones insalubres.
En el lugar donde también participaron autoridades de Copriseg, encontraron que en uno de los cuartos estaban tres personas que cuidaban a una mujer enferma que presentaba problemas respiratorios y era suministrada con un tanque de oxígeno.
El hotel que operaba como clínica clandestina, fue clausurado por la dirección de reglamentos y espectáculos.
La hospedería, ubicada en la calle Diego Hurtado de Mendoza, lateral de la Vía Rápida, entre las avenidas Costera Miguel Alemán y Andrés de Urdaneta, tenía turistas hospedados, y cuando llegaron los representantes de los tres niveles de gobierno, encontraron que no se aplicaba las medidas de prevención sanitaria, a pesar de que había niños y adultos realizando actividades recreativas en el área de la alberca.
Las autoridades estatales y municipales determinaron implementar un cerco sanitario y someter en cuarentena a trabajadores y huéspedes del hotel, para descartar que entre ellos haya casos positivos y prevenir en su caso riesgos de más contagios de COVID-19.
