Emulando al caballo, el camello y el elefante de Melchor Gaspar y Baltazar, las motocicletas del grupo Centauro de Reacción Inmediata de la policía estatal, fueron utilizadas este miércoles para llevar un mensaje de paz y alegría a cientos de niños de la periferia de Acapulco, y es que los elementos de esta corporación hicieron una colecta y compraron dulces y juguetes para llevarlos a los más necesitados.
Los policías de manera anónima en los últimos días sensibilizaron a sus compañeros y aportaron una pequeña parte de su emolumentos decembrinos para adquirir pequeños juguetes y dulces que se repartieron en la zona conurbada de Acapulco.
"Todos los días recorremos estas calles, y vemos que hay muchos niños a los que los reyes magos no los visitarán porque hay mucha pobreza, por eso decidimos hacer esta labor", comentó uno de los uniformados que en la moto cargaron los dulces.
Destacaron que la acción fue iniciativa del personal operativo, no tiene nada que ver con algún político, candidato, "esto es lo que nosotros simples policías compramos para tratar de hacer felices a niños de escasos recursos".
Los policías motorizados, expresaron que la acción que realizaron este miércoles les deja una experiencia sin igual, porque hoy dejaron de perseguir delincuentes para atraer a los niños y dejaron de recibir insultos y maldiciones de quienes delinquen por recibir gracias y bendiciones de pequeños que los vieron como sus amigos.
"Nuestra función es la de prevenir el delito y hoy creo que fue una de las acciones que más impacto pueden tener porque los niños vieron que un policías no es su enemigo, que un policía puede ayudarlo y eso les dará seguridad".
Finalmente los policías indicaron que el buen éxito que tuvo su actividad buscarán que se replique para el próximo año y otros de sus compañeros también puedan desprenderse de algún recurso y poder sentir lo bien que es estar rodeado de niños que agradecen un pequeño presente
